Causas/Síntomas

No se conoce la causa de la artritis reumatoide. Los genes, el ambiente y las hormonas pueden tener un rol.

La artritis reumatoide se clasifica como una enfermedad autoinmune, que se desarrolla debido a que determinadas células del sistema inmunológico no funcionan correctamente y comienzan a atacar a las articulaciones sanas. Generalmente, el sistema inmunitario ayuda a proteger el cuerpo de una infección o de una enfermedad. En la artritis reumatoide, el sistema inmunitario ataca el tejido sano en las articulaciones. También puede causar problemas médicos en el corazón, los pulmones, los nervios, los ojos y la piel.

Factores de riesgo

Los factores que pueden aumentar el riesgo de padecer artritis reumatoide incluyen:

  • El sexo. Las mujeres son más propensas que los hombres a desarrollar artritis reumatoide.
  • Edad. La artritis reumatoide se puede producir a cualquier edad, pero más frecuentemente comienza a mediana edad.
  • Antecedentes familiares. Si un familiar padece artritis reumatoide, el riesgo de que padezcas la enfermedad puede ser mayor.
  • Tabaquismo. Fumar cigarrillos aumenta el riesgo de desarrollar artritis reumatoide, especialmente si tienes una predisposición genética a desarrollar la enfermedad. Fumar también parece estar asociado a una gravedad mayor de la enfermedad.
  • Sobrepeso. Las personas que tienen sobrepeso parecen presentar un mayor riesgo de desarrollar artritis reumatoide.

Los signos y los síntomas de la enfermedad pueden incluir los siguientes:

– Articulaciones sensibles, calientes e hinchadas

– Rigidez articular que generalmente empeora por las mañanas y después de la inactividad

– Cansancio, fiebre y pérdida del apetito

En sus inicios, la artritis reumatoide tiende a afectar primero las articulaciones más pequeñas, especialmente las que unen los dedos de las manos con las manos y los dedos de los pies con los pies.

A medida que avanza la enfermedad, los síntomas suelen extenderse a las muñecas, las rodillas, los tobillos, los codos, la cadera y los hombros. En la mayoría de los casos, los síntomas se producen en las mismas articulaciones en ambos lados del cuerpo.

Alrededor del 40 % de las personas que padecen artritis reumatoide también presentan signos y síntomas que no impliquen a las articulaciones. Las zonas que pueden estar afectadas incluyen las siguientes:

  • Piel
  • Ojos
  • Pulmones
  • Corazón
  • Riñones
  • Glándulas salivales
  • Tejido nervioso
  • Médula ósea
  • Vasos sanguíneos

Otros síntomas menos frecuentes son: fiebre inexplicable, cansancio fácil, dolor de cuello, hormigueos en manos o pies, dolor en el pecho o en los costados, sequedad de la boca, enrojecimiento o sensación de arenilla en los ojos y manchas o bultos en la piel.

Los signos y los síntomas de la artritis reumatoide pueden variar en intensidad e incluso pueden aparecer y desaparecer. Los períodos de mayor actividad de la enfermedad, denominados brotes, se alternan entre períodos de remisión relativa, cuando la hinchazón y el dolor se disipan o desaparecen. Con el paso del tiempo, la artritis reumatoide puede provocar que las articulaciones se deformen y salgan de lugar.

¿Cuándo debe consultar con un médico?

Solicite una consulta con el médico si tiene molestias persistentes e hinchazón en las articulaciones.