Principales formas de presentación de la infección por Giardia
A pesar de lo mucho que molesta a algunos, vale destacar que la mayor parte de las personas que tienen Giardia en sus intestinos, carecen de síntomas o las manifestaciones son tan ligeras que no superan el límite de lo tolerable. Cuando se manifiestan molestias, las personas suelen quejarse de diarreas varias veces en el día, de muy mal olor, abundantes en volúmen y que pueden llevar a la deshidratación. No es raro el dolor abdominal, el aumento de los gases intestinales, la pérdida del apetito y disminución del peso corporal. En los niños pequeños se ha observado retardo en el crecimiento y dificultades con el aprendizaje.
A pesar de que estas alteraciones son molestas y preocupantes, la giardiasis no es una enfermedad peligrosa.
Diagnóstico
Para poner en evidencia la presencia de Giardia en el intestino de una persona, el médico se auxilia de los datos clínicos y análisis de laboratorio, especialmente el estudio de las materias fecales. Estas suelen ofrecer resultados negativos en ocasiones pues el parásito no se expulsa diariamente, por lo que puede ser que su médico pida que lleve al laboratorio más de una muestra en días alternos.
Otros métodos molestos como el aspirado del líquido del contenido duodenal, entre otros, se reservan para aquellas personas en quienes existe un elevado índice de sospecha y los exámenes de las materias fecales resultaron negativos.