Sust C.A., Dehoff P., Hallwirth-Spörk C., Lang D., Lorenz D. (2015) More Light! Improving Well-Being for Persons Suffering from Dementia. In: Zhou J., Salvendy G. (eds) Human Aspects of IT for the Aged Population. Design for Everyday Life. ITAP 2015. Lecture Notes in Computer Science, vol 9194. Springer, Cham

Sust C.A., Dehoff P., Hallwirth-Spörk C., Lang D., Lorenz D. (2015) More Light! Improving Well-Being for Persons Suffering from Dementia. In: Zhou J., Salvendy G. (eds) Human Aspects of IT for the Aged Population. Design for Everyday Life. ITAP 2015. Lecture Notes in Computer Science, vol 9194. Springer, Cham

Notas de conferencia publicadas por la editorial Springer de un evento celebrado en 2015 y relacionadas con la luz en la mejoría del bienestar de personas que sufren de demencia. El resumen de la disertación elaborada por el autor refiere: ¨La luz del día regula el ciclo de vigilia-sueño al actuar sobre receptores específicos de la retina que son sensibles al componente azul del espectro. Especialmente en los meses de invierno, la cantidad de exposición a la luz del día es insuficiente para el control adecuado del ritmo circadiano en muchas personas porque cada vez permanecen en el interior. Esto es particularmente cierto para las personas mayores o con movilidad reducida, así como para los residentes de hogares de cuidado, donde los niveles predominantes de iluminación y temperatura de color son con frecuencia demasiado bajos. Esto no solo tiene consecuencias negativas para la cognición de los residentes, sino que también perjudica sus ritmos de sueño-vigilia. Partiendo de la hipótesis de que la iluminación artificial biológicamente efectiva diseñada adecuadamente puede compensar la falta de luz del día y conducir a la regulación del ritmo de vigilia-sueño, un estudio que comprende aproximadamente 60 participantes investigó si una mejora en la condición mental y emocional de los residentes puede ser logrado. Se instaló iluminación adecuada en cuatro salas
de dos hogares de cuidado de Caritas Socialis en Viena y desde octubre de 2012 hasta abril de 2013: la iluminación básica (estática, 300 lux, 3000 K) y la iluminación de intervención (dinámica, 800-1200 lux, 3000-6500 K) se alternaron (aproximadamente cada cuatro semanas ) Los resultados indicaron que el comportamiento agitado (medido por el Inventario de Agitación de Cohen-Mansfield) aumentó con la iluminación básica y disminuyó en la situación de intervención. El comportamiento comunicativo (inventario de observación) también fue influenciado positivamente, particularmente el componente no verbal¨. Idioma: inglés