Del 1 al 7 de agosto se celebró en más de 170 países la Semana Mundial de la Lactancia Materna, destinada a fomentar la lactancia materna, o natural, y a mejorar la salud de los bebés de todo el mundo.
Desde el año 1992, del 1 al 7 de Agosto, la Alianza Mundial pro Lactancia Materna (WABA) lanzó su primera Semana Mundial para la Lactancia Materna (SMLM) con la campaña «Iniciativa del hospital amigo del niño. Igualmente con la semana mundial se conmemora la Declaración de Innocenti, formulada por altos cargos de la OMS y Unicef en agosto de 1990 con el fin de proteger, promover y respaldar la lactancia materna.
El lema de este año, en particular, fue “En el siglo XXI: amamanta donde sea, cuando sea” , a fin de transformar la lactancia materna en un comportamiento normativo, para lo que, según plantea la OPS, “es preciso derribar los obstáculos más importantes que impiden a las mujeres decidir por sí mismas si quieren amamantar y durante cuánto tiempo”.
En los últimos tiempos no pocas amigas y pacientes se han acercado a mí con múltiples interrogantes sobre la lactancia materna, ya sea porque están en la etapa gestacional o porque durante el postparto, cuando han comenzado a lactar a sus bebés, se les han presentado diferentes situaciones que resultan en preocupaciones sobre el tema. De estas experiencias se derivan, en mi opinión, dos ideas importantes:
1. La preparación de las madres y las familias cubanas para desarrollar una adecuada lactancia materna, exclusiva por el tiempo recomendado (6 meses), y luego complementaria, no es la adecuada. Esto es un reflejo de lagunas en la educación para la salud.
2. Contrario a lo que pudiera esperarse, la mayoría de las madres sí desean ofrecer a sus hijos las bondades de la lactancia materna.
Mucho se ha escrito sobre las bondades de la lactancia materna para los niños, las madres y la familia. En lo personal les recomiendo consultar el sitio web de Puericultura de la red de salud de Cuba (Infomed), que dispone de información actualizada sobre este tema y otros de importancia para la orientación de los profesionales de la salud, las madres y la familia, que pueden resultar de utilidad para prepararse adecuadamente en el cuidado de la salud de un bebé durante su primer año de vida.
Durante la recién finalizada Semana Mundial de Lactancia Materna, diversos espacios de la prensa cubana publicaron interesantes trabajos dedicados al tema. Sugiero especialmente leer: “Lactancia materna: amor entre tres” y “Lactancia materna: fuente de nutrientes alimenticios y emocionales”. No obstante, de las opiniones que he recibido de algunas colegas y amigas- muchas de ellas a través de las redes sociales- y luego de la lectura de estos y otros materiales (científicos o periodísticos), entiendo que persiste una interrogante: ¿Cuál es la técnica adecuada para la lactancia materna?
En este sentido, hoy les propongo revisar:
De cualquier manera, resalto la importancia de que la preparación para la lactancia debe comenzar mucho antes del parto, de ser posible en las primeras etapas de la gestación. Los médicos y enfermeras de la familia, así como los especialistas en pediatría de las áreas de salud son los profesionales indicados para esta tarea y a quienes debe dirigirse en primer lugar la población, ante cualquier interrogante o preocupación.
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