La caída es el factor causal más importante de la fractura de cadera. El riesgo de caída va en aumento de la edad.
Multitud de razones y factores contribuyen al aumento de las tasas de caídas en los adultos mayores, muchas de las cuales pueden ser prevenidas mediante ejercicios, cuidados y técnicas que facilitan las actividades de la vida diaria y permiten tener una vida más duradera con calidad y una evolución más favorable posterior a la fractura cuando se ha recibido con anterioridad el entrenamiento.
Una vez operada la cadera fracturada la terapia de rehabilitación se iniciará tan pronto como sea posible, generalmente dentro de las 24 horas posteriores a la intervención quirúrgica, en dependencia del estado físico del paciente y la técnica realizada.
Los objetivos iniciales son evitar trastornos derivados de la permanencia en cama y mejorar la movilidad y capacidad funcional general, adiestrar al paciente y familiares para su regreso al hogar con la mayor independencia que su estado permita.
