Tortícolis

0

Tortícolis congénitos

Los tortícolis congénitos se diagnostican al nacer o más tarde, en el lactante o el niño pequeño. El tortícolis debe considerarse un signo clínico y no una patología. Su presencia puede ser el indicio de numerosas afecciones, que deben conocerse, ya que algunas son graves.
Para los especialistas en medicina física y los kinesiterapeutas revisten particular interés el tortícolis congénito postural y el tortícolis congénito muscular. En este fascículo se describen el diagnóstico y las técnicas de rehabilitación.