Tratamiento

Para el tratamiento de la neumonía se tienen en cuenta los riesgos que tiene el paciente y si necesita internamiento o no por criterios establecidos.

De manera general en la Neumonía adquirida en la comunidad se indica tratamiento de sostén, reposo, aporte calórico e hidratación adecuados, medidas antitérmicas físicas y farmacológicas, analgésicos (medicamentos para el dolor) y antitusígenos (para la tos) si lo requiere el enfermo, vigilancia hemodinámica, evolución médica diaria, prescripción de fitofármacos (jarabes expectorantes) y los antimicrobianos específicos según microorganismo aislado y su sensibilidad y la fisioterapia respiratoria.

En caso de no completarse el diagnóstico microbiológico, se indicará tratamiento empírico con antimicrobianos según los gérmenes más frecuentes conocidos, las características del enfermo, los riesgos que posee y la evolución que ha tenido. Los antibiotioticos más utilizados son: Penicilina G procainica, amoxacillina o ampicillina, cefalexina, y/o alternativas, azitromicina, claritromicina, eritromicina.

En pacientes ingresados: penicilina cristalina, cefazolina, cefalexina,  cefuroxima, ceftriaxona, cefotaxima, ceftazidima, cefepime, azitromicina, amoxicilina + sulbactán, entre otros antibióticos.