todo el consumo de tabaco no se considera tabaquismo. Hay que observar que la persona manifieste algunos de los siguientes signos:
- Consumo de siete cigarrillos por día o más
- Consumo de cigarrillos con alto nivel de nicotina (más de 0,9 mg).
- Inhalar profunda y frecuentemente
- Fumar dentro de los 30 minutos luego de despertar por la mañana
- Dificultades o imposibilidad de eliminar ese primer cigarrillo
- Mayor cantidad de cigarrillos por la mañana.
- La nicotina es un estimulante y un sedante del sistema nervioso central, que produce síntomas de abstinencia al dejarlo.
- Ansia de fumar
- Dolor de cabeza
- Mareos y vértigo
- ritabilidad
- Temblor interior
- Falta de concentración
- Temblor de manos
- Perdida de apetito
- Dolor de ojos
- Nauseas
- Vómitos
- Cambios de sabor
- Ansiedad para comer
- Contracciones musculares
- Cansancio
- Debilitamiento
- Sudor de manos
- Hormigueos en la piel
- La ansiedad de fumar aparece en picos de diferente intensidad, los más fuertes son a las 48 horas de dejar de fumar, debe de controlarlos con su fuerza de voluntad y con agua o zumos, a veces haciendo inhalaciones profundas de aire o con actividad física. El oxígeno es un buen tranquilizante de los nervios. Puede apoyarse en este periodo con complejos vitamínicos B.
¿Cuál es el tratamiento recomendado?
- Terapias sustitutivas de nicotina
Sólo en los casos necesarios se debe plantear un apoyo con terapias sustitutivas de la nicotina, con voluntad sin más hay un 8% de éxitos a la primera, sube al 10 % y hasta el 18% en la quinta intentona.