En contra de lo que mostraban datos preliminares, el uso de vitamina E o del antidiabético metformina no fue superior al placebo en los resultados al tratar la enfermedad de hígado graso no alcohólico en niños y adolescentes, según un estudio que se publica hoy en The Journal of the American Medical Association.
El trabajo, coordinado por Joel E. Lavine, de la Universidad de Columbia, en Nueva York, fue conducido en diez centros universitarios de investigación clínica entre septiembre de 2005 y marzo de 2010. Los investigadores incluyeron a 173 pacientes (de edades comprendidas entre los 8 y los 17 años) con enfermedad de hígado graso no alcohólico confirmado por biopsia.
Los pacientes recibieron una dosis diaria de 8.000 IU de vitamina E (58 pacientes), 1.000 miligramos de metformina (57 pacientes) o placebo (58 pacientes) durante 96 semanas.
Los autores del estudio han hallado que el alcance de la reducción sostenida en el nivel de alanina aminotransferasa (ALT) -una enzima que es asociada de forma significativa a la actividad de la citada patología hepática y el estadio de fibrosis en niños- fue similar a la de placebo en los grupos de tratamiento de vitamina E y de metformina. La media de cambio en el nivel de ALT desde el inicio de la terapia hasta la semana 96 fue de -35,2 U/L en el grupo placebo frente a -48,3 U/L en el grupo de vitamina E y -41,7 U/L en el grupo de metformina.
Estos resultados han sugerido que los niños tratados con vitamina E con esteatohepatitis no alcohólica mejoraron en los resultados histológicos secundarios con vitamina E.
(JAMA; 2011: 305 [16] 1659-1668).
