El hígado es la viscera más grande de nuestro organismos y, a la vez, uno de los órganos más importantes del cuerpo humano por sus funciones. Se sitúa en la parte superior derecha de la cavidad abdominal, delimitado por encima con el diafragma y protegido a su alrededor por los arcos costales inferiores del lado derecho.
En una persona adulta su peso es de aproximadamente 1500 gramos.
Al microscopio, el hígado está constituido principalmente por dos tipos de células: Los hepatocitos y las células de Kupffer. Estas se disponen de una forma muy particular junto con el sistema arterial, venoso y biliar.
Los hepatocitos realizan todas las funciones clásicas del hígado (síntesis, metabolización, almacenamiento de sustancias, como vitaminas minerales hierro y azúfcares, etc.), mientras que las células de Kupffer tienen una función inmunológica y de defensa.
El hígado puede verse sometido a muchas situaciones perjudiciales que generan enfermedades de diferentes magnitudes y naturaleza. En ocasiones, estas alteraciones pueden llevar a una enfermedad avanzada que se caracteriza generalmente por insuficiencia de este órgano.
Una dificultad habitual que se puede apreciar en la detección de la enfermedad hepática es que en la mayoría de casos no se producen síntomas y no se manifiestan síntomas del insuficiencia hepática hasta que la enfermedad está muy avanzada.
Los avances y el conocimiento relacionado con el diagnóstico y tratamiento de las enfermedades del hígado y las vías biliares (enfermedades hepatobiliares) han sido enormes en las últimas décadas. Inicialmente era un campo de estudio de las Ciencias médicas donde participaban de forma indistinta especialistas de Medicina Interna, Gastroenterología y Cirugía general. Pero poco a poco, con el desarrollo científico y tecnológico, sumado a las complejidades anatomofuncionales del hígado y sus afecciones, han llevado a que aparezca en muchas partes del mundo la figura del «hepatólogo».
Aunque es considerada en algunas regiones como una nueva especialidad (la Hepatología), es habitual que aún se aprecien a especialistas de Medicina Interna y Gastroenterología, preferentemente, quienes se vinculen estrechamente con el manejo de estas enfermedades.
El porqué del desarrollo de esta nueva rama de las ciencias médicas puede hallarse, asimismo, en el impacto que en la salud de la población mundial muestran muchas de las enfermedades hepáticas. Este impacto hace que sean identificadas en muchas oportunidades como trascendentales problemas de salud.
Se pueden tomar como ejemplo la cirrosis hepática, las hepatitis virales, las enfermedades hepáticas asociadas a trastornos metabólicos y el cáncer: Todas estas muestran año tras año repercusiones en indicadores epidemiológicos como en la incidencia, la prevalencia, la morbilidad y la mortalidad.
Por todas estas razones es que dedicamos el presente sitio que forma parte del Portal de Enfermedades del Centro Nacional de Información de Ciencias Médicas (Infomed). Aquí podrán tener la oportunidad de interactuar, además, con otros especialistas cubanos que cuentan con gran experiencia y prestigio dentro de este campo. Hallarás, además, información actualizada sobre algunas enfermedades hepáticas, su cuadro clínico, sus factores de riesgo y su tratamiento.
Es una página web diseñada para una población cada vez más demandante de conocimientos científicos, como los pacientes y sus familiares. Quienes nos visiten conseguirán participar activamente en la selección de sus contenidos, hacer preguntas y esclarecer dudas acerca de «las enfermedades hepáticas».
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