mayo 2010 Archives

0

Evaluación de los tratamientos y técnicas de rehabilitación

En 1978, el profesor Grossiord justificó el desarrollo de la kinesiterapia y de la reeducación funcional como respuesta a una nueva necesidad, relacionada con el incremento de las patologías invalidantes. Llegó a la conclusión de que era necesario crear una nueva disciplina, centrada en los problemas de la reeducación funcional y de la readaptación.
Desde entonces, la importancia de esta especialidad no ha hecho sino crecer y se ha impuesto en numerosos campos.
Sin embargo, al igual que cualquier actividad terapéutica, la rehabilitación debe someter sus tratamientos a una cuidadosa evaluación; de lo contrario, corre el riesgo de quedar relegada al rango de medicina paralela. Tanto la kinesiterapia como las terapéuticas manuales, la fisioterapia o la hidroterapia han de aportar pruebas de su eficacia mediante ensayos terapéuticos dotados de todas las garantías de una metodología rigurosa.
Ésta se encuentra actualmente bien establecida, principalmente para los medicamentos, y puede ser aplicada a los ensayos terapéuticos que evalúan la rehabilitación.

0

Rehabilitación tras cirugía endoscópica de rodilla

Los primeros estudios publicados sobre artroscopia datan de 1918; sin embargo recién en la década de los 60 comenzó su verdadero auge gracias a Watanabe, quien en 1962 realizó la primera meniscectomía parcial; posteriormente continuaron su obra otros importantes traumatólogos, como Jackson, O’Connor y Gillquist.
En Francia, H. Dorfman fue el primero en estudiar la cavidad articular de la rodilla mediante artroscopia. Desde entonces, el gran progreso experimentado en el campo de los instrumentos y de la técnica de la artroscopia ha permitido una amplia utilización de este método diagnóstico y terapéutico.

0

Rehabilitación de las fracturas del extremo superior del fémur y de la pelvis

Tras mencionar algunos conceptos fisiopatológicos de las fracturas del extremo superior del fémur y sus indicaciones terapéuticas, se abordarán las condiciones del tratamiento inicial de las fracturas más complejas en un servicio de medicina física y de readaptación. Las fracturas simples son tratadas en rehabilitación ambulatoria.
Se distingue la rehabilitación de las fracturas tratadas por osteosíntesis con o sin apoyo precoz, de la de las fracturas tratadas mediante artroplastias. Por último se abordarán los traumatismos de la pelvis y en especial las fracturas del acetábulo.

1

Técnicas de rehabilitación neuromuscular en adultos en caso de accidente cerebrovascular

Existen numerosas técnicas de rehabilitación neuromuscular aplicables a adultos que han sufrido un accidente cerebrovascular. Lamentablemente, dada la escasez de pruebas científicas que permitan demostrar la superioridad de una técnica con respecto a otra, resulta imposible seleccionar las técnicas más pertinentes como lo exigiría el principio de la medicina basada en la prueba. Este artículo comienza por una presentación sucinta de las principales técnicas neuromusculares. Luego, sin más justificación que la de un enfoque pragmático, se detalla el reaprendizaje progresivo de las adquisiciones motoras, desde darse la vuelta en decúbito hasta la marcha y la prensión funcionales, según las posibilidades del paciente.

0

Tratamiento del linfedema de las extremidades

El tratamiento de un linfedema de las extremidades se basa en la fisioterapia descongestiva, que comprende consejos prácticos sobre higiene, drenaje linfático manual, vendajes poco elásticos, el aprendizaje de técnicas de autoaplicación, contención elástica, cuidados de la piel para evitar infecciones y gimnasia específica. La fisioterapia descongestiva puede ser efectuada intensivamenteen el ámbito hospitalario, con lo que se lograría una importante disminución de volumen,y, a continuación, en régimen ambulatorio. A ella puede agregarse, en caso necesario, un adelgazamiento o un tratamiento psicológico. Aunque la cirugía de resección o de reconstrucción se emplea poco en el linfedema de los miembros debido a su eficacia variable, puede precisarse cuando existe afectación del área genital. El objetivo es obtener no sólo una disminución del volumen del linfedema, sino también la motivación necesaria para establecer un seguimiento médico regular y prolongado indispensable para el tratamiento de esta enfermedad crónica.

0

Rehabilitación de la arteriopatía de las extremidades inferiores

A pesar de las pruebas ya aportadas sobre la eficacia de la rehabilitación de la arteriopatía de las extremidades inferiores (AEI) y de la prevalencia elevada de esta afección en diversos países (2,5% [33]), en la actualidad raramente se instaura este tratamiento en muchos de ellos. Este hecho obedece ciertamente a varias causas, en particular a desconocimiento aún demasiado frecuente en medios médicos de esta posibilidad, a la clarificación insuficiente de sus indicaciones precisas y, finalmente, a la carencia cuantitativaen estructuras de rehabilitación especializada. Resulta claro, en efecto, que su instauración requiere personal y material especializado, incluyendo sobre todo técnicas no invasivas de exploración cardiovascular. Más que de una rehabilitación, se trata de una verdadera readaptación que aborda la enfermedad vascular en su conjunto y que tiende a controlar el máximo posible de factores de riesgo, lo que la aproxima a la rehabilitación cardíaca, de la cual aún se halla a menudo artificialmente separada. El reentrenamiento para el esfuerzo resulta, sin embargo, el eje principal de esta rehabilitación, debiendo serindividualizado e incluir el máximo posible de territorios musculares con el fin de alcanzar su óptima eficacia.

0

Papel de la rehabilitación en el tratamiento de las distonías

La distonía es «un trastorno motor de intensidad variable caracterizado por la contracción involuntaria de grupos musculares que fijan una extremidad, un segmento de extremidad o las cuatro extremidades y el eje corporal en actitudes particulares que siguen un esquema idéntico en un mismo paciente. La distonía no es un movimiento sino «una actitud fijada o relativamente fijada».
Las distonías primarias, que se pueden denominar también esenciales o idiopáticas, constituyen la gran mayoría de las distonías. El pronóstico de estas patologías ha cambiado con las inyecciones de toxina botulínica. La kinesiterapia, en asociación con estas inyecciones, sigue siendo un elemento importante del tratamiento.
Las distonías generalizadas se inician frecuentemente en la infancia. Se trata probablemente de un grupo mórbido que incluye varias enfermedades diferentes.
La distonía es responsable de las siguientes actitudes: hiperlordosis lumbar, flexión del tronco, inclinación del tórax, extensión del cuello. Afecta a veces a la región bucolingual produciendo alteraciones de la deglución.
Los niños y adolescentes afectados por distonía muscular deformante plantean un problema terapéutico importante y requieren una atención multidisciplinaria, que supera ampliamente los límites del tratamiento farmacológico. Incluye, entre otros, kinesiterapia y control ortopédico y tiene en cuenta los aspectos psicológicos, educativos y prácticos de la vida de los jóvenes pacientes.
Distonías focales o localizadas (por ejemplo, tortícolis espasmódico): el tortícolis espasmódico es la distonía focal más frecuente en el adulto. Se caracteriza por una actitud anormal de la cabeza, intermitente o permanente, debida a una contracción involuntaria de los músculos cervicales.
El objetivo de la rehabilitación es lograr la inmovilidad de la cabeza y el equilibrio postural entre los diferentes músculos cervicales.
El aspecto esencial es la revalidación de los músculos cervicales cuya acción debería normalmente oponerse al desplazamiento o a la postura patológica de la cabeza. Cada tortícolis espasmódico posee sus particularidades (intensidad, músculos implicados, forma tónica o clónica, etc.), teniendo cada uno un programa de rehabilitación específico.
Distonías de función (por ejemplo, calambre de los escribientes): el calambre de los escribientes es una distonía segmentaria que afecta esencialmente a los músculos de la muñeca y de los dedos. Altera la escritura mientras que todas las demás actividades funcionales que implican la utilización de estos mismos músculos no se ven afectadas.
Esquemáticamente, la rehabilitación puede dividirse en tres fases sucesivas.
El período inicial consiste en educar la colocación del cuerpo en la posición de escritura y en obtener la relajación de los músculos distónicos. El período siguiente se dedica a la coordinación de los músculos implicados en la función de escritura. El período final es el tiempo de educación de la «escripción».

0

Recuperación de la bipedestación y de la marcha en el paciente parapléjico

El problema que supone la recuperación de la marcha en un parapléjico que presenta lesiones a nivel dorsal es importante, especialmente desde que la rehabilitación precoz y los progresos de los tratamientos médicos, quirúrgicos y las técnicas rehabilitadoras ofrecen a los pacientes, incluso a los que sufren parálisis completas de las extremidades inferiores, una calidad de vida aceptable y, en ocasiones, muy buena. Sin embargo, este objetivo resulta difícil de alcanzar. Por ello, en los últimos años se han multiplicado las proposiciones que tienden a facilitar esta recuperación: aunque los resultados no sean satisfactorios por el momento, es previsible que en un futuro cercano existan soluciones eficaces en este campo.

0

Rehabilitación en los casos de traumatismos craneales

El progreso reciente de las técnicas de reanimación ha transformado la asistencia médica inicial y ha reducido el riesgo de mortalidad, permitiendo la supervivencia de accidentados con lesiones muy graves. El desarrollo de las técnicas de diagnóstico por imágenes y la exploración neurofisiológica moderna han transformado también las condiciones de supervisión clínica.
La rehabilitación, que continúa el tratamiento, ha debido adaptarse a estos cambios y ha experimentado también una importante renovación. En todo momento, el médico debe estar informado y conocer los datos neuropatológicos y los resultados de las diversas investigaciones complementarias.
La calidad de la asistencia inicial, así como la elaboración de un proyecto terapéutico coherente y adaptado, exigen tener en cuenta este aspecto, incluso si los datos iniciales necesitan también una confrontación cuidadosa y repetida con los datos clínicos de la evolución.

0

Rehabilitación de las parálisis faciales centrales y periféricas

La rehabilitación facial sólo puede comenzar después de haber explorado el habla y la masticación y de haber realizado estudios analíticos de la sensibilidad y la motricidad. Debe tener en cuenta la morfología del rostro antes de la enfermedad, a fin de determinar el lado dominante y el lado dominado. Todo ello permite obtener una mejor respuesta a la rehabilitación y prevenir eventuales secuelas.
La rehabilitación es en realidad una «auto-rehabilitación» que implica la participación del paciente en su plan de tratamiento, pero siempre bajo la dirección y los conocimientos del terapeuta y después de haber sido debidamente informado sobre su patología. Este procedimiento permite al paciente realizar esfuerzos, recuperarse y tomar conciencia de las limitaciones de la readaptación y de su recuperación, con lo que mejora su aceptación de las secuelas restantes.
Durante la consulta se debe proporcionar al paciente toda la información que necesite para sentirse seguro, y dar respuestas claras a todas sus preguntas; además, se le entregará un plan de trabajo escrito y personalizado, junto con consejos de higiene de vida que le permitan afrontar sus limitaciones y manejarlas cotidianamente.
Por otra parte, debe dársele la posibilidad de ponerse en contacto con el terapeuta ante la menor duda, vacilación o angustia relacionadas con la evolución de su enfermedad.