abril 2010 Archives

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La mayoría de las personas pasan la vida deseando hacer algo a la perfección – Tal como tocar el piano o pintar – mas son demasiado perezosas o negligentes para llevar a cabo el esfuerzo que se requiere a fin de lograr el éxito en el campo deseado. Así pues continúan durante años haciendo las cosas de manera ineficaz, y se excusan a sí mismas diciendo: “Jamás he podido encontrar a un buen profesor o suficiente tiempo para practicar; de todos modos, no soy un genio”. Sin embargo, más importante que poseer un talento extraordinario es poseer un firme propósito y una dedicación y esfuerzo infalibles. Si un individuo con inteligencia promedio practica el piano con regularidad durante 5 horas al día bajo la guía de un profesor competente, puede convertirse en un hábil ejecutante.  Paramahansa Yogananda.

Nuestra profesión es eminentemente práctica y el texto anterior puede servir para animar a aquellos estudiantes que tienen pocas habilidades manuales.

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El lenguaje expresa quienes somos, que pensamos, que sentimos, de dónde venimos, hacia donde vamos. Se dice que envuelve y proyecta el pensamiento, lo pule y engrandece. La delicadeza al hablar resulta consustancial a la buena imagen personal. No la destruyas.

Para seducir y convencer no hay nada como adoptar un lenguaje natural, donde la autenticidad sea la base de la seguridad personal. El lenguaje es parte de la vestimenta del pensamiento y definir como lo vistes de acuerdo con tu estilo, tu forma de ser y edad resulta ineludible.

La magia de la palabra apuntala la comunicación. No olvides que la lengua española la hablan más de 450 millones de personas en el mundo. (…….). El buen decir, incluidos el tono, la modulación y el uso apropiado de las palabras se convierte en sabia nutritiva para el desarrollo de la personalidad.

Ahora más que nunca, dominar los significados de las diferentes palabras, emplear las adecuadas en la comunicación cotidiana, desplazando vulgaridades y chabacanerías, resultan una obligación.

Gladys E. Egües

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  • Se afable en tu trato con los demás.
  • Cultiva la solidaridad.
  • Sé galante y practica la amabilidad.
  • Reconoce los méritos de otras personas.
  • Presta debida atención a los problemas de los otros.
  • Llega puntual a los compromisos que contraigas.
  • Respeta el espacio y el tiempo de las otras personas.

Gladys E. Egües