Principios de Orientación para la Alimentación del Niño Amamantado
La Organización Panamericana de la Salud y la Organización Mundial de la Salud han publicado este manual con el objetivo de brindar orientaciones para la alimentación del niño amamantado. La alimentación complementaria se define como el proceso que comienza cuando la leche maternal sola
ya no es suficiente para cubrir las necesidades nutricionales de los lactantes y por ende, otros alimentos y líquidos son necesarios además de la leche materna. El rango de edad óptimo para dar alimentación complementaria está habitualmente entre los 6 y 24 meses de edad, si bien la lactancia materna puede continuar hasta después de los dos años. Una revisión de las guías alimenticias promovidas por varias organizaciones nacionales e internacionales demostró que existen inconsistencias en las recomendaciones específicas para la alimentación de lactantes y niños pequeños.
Algunas guías se basan en tradiciones y especulaciones más que en bases científicas, o son mucho más específicas de lo necesario en cuanto a temas como el orden de introducción de alimentos y las cantidades específicas de alimentos que debe recibir el lactante.Para evitar confusión, es necesario
contar con unas guías unánimes que puedan ser adaptadas a las prácticas alimenticias y condiciones locales. Las guías descritas en este documento son el resultado de extensas discusiones llevadas a cabo en varias consultas técnicas y documentos sobre alimentación complementaria OMS/UNICEF, 1998; Consulta Técnica de la OMS/UNICEF sobre la Alimentación del Niño Pequeño, 2000; Consulta Mundial de la OMS sobre la Alimentación Complementaria, 2001; Academia para el Desarrollo Educacional, 1997; Dewey y Brown, 2002). El grupo objetivo de estas guías son los niños amamantados durante los primeros dos años de vida.