el futuro del hombre

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Cosmovisión de la complejidad

La complejidad nace dentro del paradigma general de la ecología y sobre todo de la cosmovisión de la ecología profunda. Las ideas de Morin fueron antes de la consolidación del paradigma tecnologista. Al igual que las demás cosmovisiones busca darle un sentido al futuro, y es que todas las grandes ideologías giran en torno al destino de la humanidad, y a comprender qué futuro nos espera. Sin embargo hasta ahora la cosmovisión dela complejidad no se ha visto como alternativa a los escenarios del futuro, ya que estos, siempre se han clasificado como un enfrentamiento entre transhumanistas y bioconservadores, siendo los escenarios que conducen a un futuro posthumano los más elaborados, de ahí la necesidad de un análisis de la cosmovisión de la complejidad a la luz de las nuevas tecnologías.

Sabemos que para los ecologistas lo más importante es la supervivencia de la especie humana, la cual está amenazada por la actitud irresponsable de los humanos que están destruyendo el planeta mientras para los tecnologista los humanos tienen la opción de fusionarse con las tecnologías y romper con los limites biológicos (incluido el planeta) se proponen construir un entorno cada vez más artificial donde vivirán los transhumanos. Lo cual nos lleva a dos opciones; o protegemos a la naturaleza (nuestro entorno natural) o aceleramos a las tecnologías (creamos un entorno artificial) y nos convertimos en parte de la tecnología.

Al no estar conforme con la solución que les dan a los problemas las anteriores cosmovisiones traté de hallar una que estuviera de acuerdo con mi propia visión del mundo y ante la necesidad de crear alternativas viables a un progreso humano verdaderamente digno. Fue a través del paradigma de la complejidad que encontré la justificación a la cosmovisión que llevaba años tratando de definir. Por otra parte, es la única que busca un cambio de mentalidad y la única que trabaja sobre una nueva forma de pensar desde la participación de todos con un enfoque transdisciplinar.

Sin embargo, se necesita actualizar la complejidad de acuerdo a las nuevas cosmovisiones que han ido surgiendo, en especial, la singularidad tecnológica y el transhumanismo, las cuales están teniendo un gran impacto ya sea por sus beneficios o por sus riesgos. Entre los riesgos el más mediático es el de la inteligencia artificial fuera de control, del cual se han hecho eco todos los grandes pensadores actuales.

El tecnologismo nos ofrece un futuro posthumano mientras el ecologismo un futuro sostenible. Y cada uno tiene sus propias propuestas, ahora tenemos que estar consciente sobre que individuo queremos ser y en qué sociedad queremos vivir. Cada futuro nos ofrece sus ideas sobre lo que es el progreso humano. Personalmente no concuerdo con el tratamiento que le da el paradigma ecologista y sus cosmovisiones al individuo y sus posibilidades como ser (la manifestación plena del ser) en el caso del paradigma tecnologista, no coincido con el tratamiento que se le da a los problemas sociales, los cuales en muchos casos se ignoran o se subordinan a las tecnologías.

Según Godel, fundador de la prospectiva, es más fácil cambiar a la sociedad que al individuo. Por lo que comenzaremos por el progreso social y las propuestas para un futuro sostenible y las propuestas para un futuro posthumano.

Ahora vamos a analizar los cambios sociales en el próximo articulo veremos los cambios individuales pero antes pero antes vamos a proponer una idea sobre el futuro de la humanidad desde el enfoque de la sinergia que se está produciendo entre humanos y tecnologías.

Tipos de simbiosis humano-tecnologia

Pienso que uno de los problemas más importantes que tenemos hoy además del dilema de Potter sobre la falta de sabiduría para manejarnos con los nuevos conocimientos y de los riesgos y beneficios del uso de las tecnologías (que está ligado con el de Potter), también está la sinergia humano-tecnología o sea el tipo de relación que está estableciendo desde hoy entre humanos y tecnologías y a qué tipo de simbiosis nos conducirá.

Para comprender las diferencias cosmovisiones y  a modo de ilustración he realizado una clasificación sobre cómo podría ser la sinergia entre humanos y tecnología (simbiosis)

Ya desde hoy se está produciendo una simbiosis entre humanos y tecnología

 Ectosimbiosis parasitaria. Se ven a las tecnologías como un peligro a la espiritualidad, a la religión, a la naturaleza, ya que estas lo que hacen es alejar al ser humano de su propia condición humana. La tecnología tiene un efecto contaminador y pernicioso para los valores humanos y para el planeta. Prohibir las tecnologías.

Ectosimbiosis comensal.  Las tecnologías tienen una sola función beneficiar a los seres humanos, los cuales deben tener un control casi absoluto sobre estas. Se deben aplicar bajo el principio de precaución.

Ectosimbiosis mutual. Relación donde tanto los humanos como las tecnologías se benefician, se produce una cooperación entre ambos, se busca seguir evolucionando sin que los humanos pierdan su propia condición.

Endosimbiosis parasitaria. Las tecnologías vienen a salvar al planeta, a resolver todos los problemas que los limitados humanos no han podido resolver y estos deberán ser reconstruidos por las tecnologías. Abandonar el cuerpo y vivir en un entorno artificial.

Endosimbiosis mutual. Se produce fusión entre humanos y tecnologías (el Cyborg), debido a la superioridad del progreso tecnológico sobre el progreso humano, por lo que este no tiene más opción que fusionarse con la tecnología. Se aspira a lo mejor de las tecnologías con lo mejor de los humanos por medio de la fusión.

Endosimbiosis comensal. Relación donde los humanos esperan beneficiarse de las tecnologías, sobre todo por medio de la ingeniería genética. Humanos mejorados por medio de las tecnologías de manera racional.

Esto nos da cierta claridad sobre las posiciones que están asumiendo las diferentes cosmovisiones y a qué tipo de simbiosis nos podría llevar.

Podemos ver que las endosimbiosis buscan el uso invasivo de las tecnologías en el individuo con el fin de potenciar sus facultades, por su parte, las ectosimbiosis buscan una relación humanos tecnologías manteniendo la condición humana, y van desde prohibir a las tecnologías hasta lograr una colaboración estrecha entre humanos y tecnologías.

Es fácil darse cuenta que el futuro sostenible aspira a una ectosimbiosis entre humanos y tecnologías mientras el futuro posthumano a una endosimbiosis entre ambos. Y parece que solo la endosimbiosis nos puede llevar a un verdadero progreso, al poder favorecernos directamente de las tecnologías.

El progreso social

Si estamos de acuerdo con alguna de las cosmovisiones existentes, no hay problema, pero si no, entonces, ¿Qué alternativa tenemos?

Ante las cosmovisiones actuales, las cuales no encajan con lo que entiendo por un progreso humano verdaderamente digno, he buscado mi propia alterntativa sobre todo ante el futuro posthumano, que, como ya he dicho, es el escenario futuro más posible. Para ello parto del concepto de que el ser humano no ha alcanzado todo su potencial evolutivo y por medio de su propia fuerza interior y la formación de una consciencia social que acepte la responsabilidad sobre el planeta, sobre las especies y sobre sí mismo, en aras de su propio progreso humano; que incluya relaciones profundas, que sustituyan las relaciones superficiales actuales basadas en la competencia, y que se establezca no solo entre humanos sino, también, entre humanos y tecnologías colaborativas (sostenibilidad tecnológica), siguiendo un enfoque transdisciplinar.

Mi idea es lograr un futuro sostenible con todas las ventajas de las tecnologías siguiendo el esquema de una ectosimbiosis mutual. Pero debido a la influencia de los pensadores futuristas he ignorado las complejidades sociales en aras de escenarios pre-establecidos sobre el futuro. Fueron las ideas de Morin las que me hicieron recapacitar sobre la dimensión real de los problemas y ver a la cosmovisión de la complejidad como la mejor propuesta para la humanidad.

Crisis actual y sus problemas. (ver El futuro del hombre. Sus escenarios)

  • El fracaso del neoliberalismo y su ideal de un futuro próspero. La pérdida de la esperanza de un mundo verdaderamente justo.
  • El pobre avance hacia un futuro sostenible basado en acciones preactivas. La lentitud de las reformas ecológicas ante los peligros de la contaminación y la amenaza a las especies.
  • El incremento de los partidarios del futuro poshumano. La aceptación cada vez mayor de las ideas transhumanista.

En su libro ¿Hacia el abismo?, Morin hace una análisis de hacia dónde va la humanidad. Siguiendo a Morin desde su posición ecologista, propone:

 Ecologismo

  • Evitar el desastre ecológico (ir al futuro sostenible)
  • Volver a empezar después del desastre (idea recurrente en Morin, quien propone una metamorfosis social)
  • Desastre final. Ya no hay comienzo, lleva a la extinción de la especie humana

Como hemos visto, otra cosa es la posición tecnologista

 Tecnologismo

  • Evitar la posthumanidad (equivale a ir al desastre)
  • Ir a la posthumanidad (futuro posthumano)

Ahora para evitar el desastre ecológico es necesario llevar a cabo acciones que pueden ser acciones ecológicas para alcanzar el futuro sostenible o acciones tecnológicas para alcanzar el futuro posthumano.

 Acciones socio-ecológicas para evitar el desastre (o para empezar después del desastre)

  • Ecología profunda
  • Desarrollo sostenible
  • Metamorfosis social (Morin)

 Acciones tecno-individuales para evitar el desastre

  • Posthumanismo
  • Transhumanismo
  • Metamorfosis individual (debe surgir como complementación a la metáfora social desde un accionar transdisciplinar)

 La metamorfosis social como solución

 Hemos estado diciendo que todo indica que vamos hacia el tecno-liberalismo (transhumanismo liberal) por lo que no parece posible que se alcance un futuro sostenible. Morin, parece estar de acuerdo cuando dice: La modernidad no incluye el concepto de complejidad, lo cual requiere de una metamorfosis, de seguir por el rumbo actual va a ser imposible que suceda.

En otra parte Morin afirma: Cuando un sistema es incapaz de tratar sus problemas vitales y fundamentales o bien se desintegra, o bien encuentra en sí mismo la capacidad de segregar una metamorfosis; es decir crear un metasistema nuevo y más rico.

De nuevo estamos ante la idea de la proximidad del desastre como forma de alcanzar una metamorfosis social. En mi opinión el metasistema será producto de una simbiosis de carácter mutual entre humanos y tecnologías, solo así se lograría la emergencia necesaria para lograr la transformación.

Es interesante cuando Morin dice: Los intercambios de civilización inician una simbiosis, los diversos mestizajes se multiplican, y por todas partes se manifiesta la aspiración a otra civilización, a otra vida. Está claro que cuando Morin habla de otra vida se refiere a una vida mejor para los seres humanos y no al ideario transhumanista de alcanzar otra vida como seres tecnológicos.

Morin está seguro que estamos ante una crisis planetaria, a lo que dice: El abismo se reafirma y se expande con el antagonismo que se da ante el caos, que puede ser destructor, como lo que pueden generar las armas de destrucción masivas, la degradación del medio ambiente, el agotamiento de los recursos naturales es, esto se debe a que la política, la conciencia, el pensamiento y la civilización, están sometidas al pensamiento económico; pero ese caos también puede ser genérico, genera una metamorfosis, un feedback positivo, que va a permitir un combate interno entre el amor y la racionalidad cerrada. Una metamorfosis social que nos salvaría del caos mundial que se avecina.

Para mí la metamorfosis social queda incompleta si, a su vez, no se produce una metamorfosis individual. Idea que defiende Morin, como fundamento del paradigma de la complejidad: la necesidad de una cambiar nuestra manera de pensar.

 En el próximo articulo (y posiblemente final) trataremos sobre el progreso individual

Imagen: ibrnj.org

 

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La simbiosis entre humanos y tecnologías.

En el artículo “Humanos y tecnologías, hacia una nueva relación”, definíamos los conceptos de una simbiosis entre los humanos y las tecnologías y las características que tendrían, veamos ahora como se clasificarían dado las tendencias actuales. Para lo que partimos de la idea de que vamos hacia una superestructura tecnológica donde las tecnologías llegarán a formar parte de las decisiones del planeta y, por ende, del surgimiento de una singularidad tecnológica y las vías para lograr una superinteligencia, en el libro “Inteligencia artificial y el futuro del hombre” se realiza una explicación crítica de las tendencias en la inteligencia artificial (IA).

En el artículo antes mencionado, se habían definido las características de la simbiosis; si es exógena, como ectosimbiosis; y si es endógena, como endosimbiosis así como las variantes parasitaria, comensal y mutual. Podemos decir que el transhumanismo se incluye dentro de la definición de una endosimbiosis, ya que aspira a una fusión entre humanos y tecnologías; en cambio los ambientalistas estarían dentro de una ectosimbiosis donde la tecnología se ve como un medio (infraestructura).

Por otra parte, no creo que el problema sea, si va a producirse o no, una simbiosis humano-tecnología; ya se está produciendo, al menos como ectosimbiosis, mientras la ideología tecnologista, lo que está proponiendo es una forma de endosimbiosis. El verdadero problema consiste en saber que nos depara el futuro. A continuación veremos los tipos de simbiosis, aclaro que nos referiremos exclusivamente a la dimensión humano-tecnología, ignorando las demás dimensiones humanas: biológica, psicológica y social, como hacen la mayoría de las ideas tecnologistas.

Los tipos de simbiosis

Ectosimbiosis parasitaria
Se ven a las tecnologías como un peligro a la espiritualidad, a la religión, a la naturaleza, ya que estas lo que hacen es alejar al ser humano de su propia condición humana, la ven como un efecto contaminador y pernicioso para los valores humanos y para el planeta.

Ectosimbiosis comensal
Humanos y tecnologías interactúan de forma exógena donde solo se benefician los humanos. En general las tecnologías deben estar en función de un desarrollo sostenible y deben ser tecnologías renovables y no contaminantes que permitan el crecimiento económico sin deteriorar el planeta, lo cual debe estar bajo el control humano. Principio de precaución.

Ectosimbiosis mutual
Relación donde tanto los humanos como las tecnologías se benefician, se produce una cooperación entre ambos, lo que da lugar a una superinteligencia colectiva.

Endosimbiosis mutual.
Fusión entre humanos y tecnologías (el Cyborg). Ante el progreso tecnológico y su superioridad sobre el progreso humano, por lo que este no tiene más opción que fusionarse con la tecnología dando lugar a una superinteligencia híbrida.

Endosimbiosis comensal.
Relación donde los humanos esperan beneficiarse de las tecnologías, sobre todo por medio de la ingeniería genética, por lo que estaremos ante una superinteligencia biológica.

Endosimbiosis parasitaria.
Sustitución de los humanos por las tecnologías. Las tecnologías vienen a salvar al planeta, a resolver todos los problemas que los limitados humanos no han podido resolver y estos deberán ser reprogramados por las tecnologías (inmortalidad digital). Los humanos solo pueden vivir dentro de la tecnología, mundos virtuales, como programas que representan (copias) la mente de un humano, la ansiada superinteligencia artificial.

Personalmente defiendo una ectosimbiosis mutual, ahora si me preguntan cuál es la más probable, en este momento; creo que ninguna, sino cambiamos nuestra mentalidad actual, y es que durante siglos hemos sido incapaces de enfrentar las causas y nos hemos ido acomodando a resolver los efectos que producen: mitigar la pobreza, disminuir el calentamiento global, reducir el armamento, etc., mientras la situación del mundo se hace cada vez más insostenible (en el libro “Crisis en el siglo XXI, se analiza el tema), sin contar que vamos a ciegas al futuro, teniendo como única bandera una tecnoutopía objetivamente inalcanzable, dado el contexto actual de poder en el que se van a agudizar más los problemas en lugar de resolverse, y es que en realidad nos movemos, por inercia, hacia una crisis perfecta (singularidad general), donde los problemas ya no pueden seguir postergándose y las causas ya no pueden ser ignoradas so pena de desaparecer para siempre de la faz de la Tierra.

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Habíamos hablado en el artículo anterior, el fin de la historia del hombre, sobre las ideas de Francis Fukuyama, sobre el futuro del hombre, donde vimos que Fukuyama se hacia la eterna pregunta de todos los grandes pensadores sobre ¿qué futuro nos espera? Y concretamente se preguntaba ¿si podían existir otras contradicciones en las sociedades liberales que no pudieran resolverse?

Fukuyama en ese entonces, hace más de veinte años, asumía que el clásico enfrentamiento entre los ideólogos del liberalismo y los ideólogos del socialismo ya había llegado a su final, con el triunfo rotundo de la ideología del libre mercado, como la única capaz de responder plenamente a los intereses humanos (optimismo con el que cerró el siglo XX), pero veía con cierto temor el surgimiento de nuevas alternativas, el de un nacionalismo social y el posible surgimiento de un estado teocrático refiriéndose a los musulmanes; diez años después comenzó a cuestionarse el impacto de la ideología transhumanista y sus consecuencias (en especifico la biotecnología) sobre el futuro de la humanidad. Ahora la pregunta es: ¿son esas las únicas alternativas?

Ahora, a principios del siglo XXI, nos encontramos con que se ha ido incrementado el deterior del planeta y no parece tener solución, las tecnologías cada vez son más poderosas y omnipresentes mientras la enajenación humana parce tomar nuevas formas. Y es como si todas las crisis comenzaran a unirse y nos acercáramos a una crisis total de alcance global y donde las soluciones locales no parecen funcionar. Y en la opinión de muchos, se necesita, cada vez más, de un enfoque transdisciplinar para poder enfrentar la problemática actual.

Podemos afirmar que en el siglo XXI han ido surgiendo nuevas alternativas, que ya habíamos mencionado en el artículo: las posiciones tecnológicas ante el futuro del hombre. Volveremos sobre las ideologías de este siglo que están surgiendo como alternativa a la ideología neoliberal vigente.

transhumanismo-democratico James Hughes, representante de la alternativa democrática al transhumanismo. Director del Instituo para la ética y las tecnologías emergente. A pesar de su enfoque transhumanista asume posiciones de cierto corte progresista en lo social y lo ambiental.

Nuevas alternativas a la ideología neoliberal (capitalismo actual)
1. Tecnologismo. Parte de la aceptación de que las máquinas superaran a los humanos y esto llevará a una nueva era poshumana (singularidad tecnológica). La cual nos lleva a un poshumanismo acelerado y a una superestructura que se monta por encima del capitalismo y que incluso puede desplazarlo, ya que lo único importante sería el progreso tecnológico (super-optimismo tecnológico).
2. Capitalismo posmoderno. Parte de la idea de que el ser humano posee limitaciones que solo pueden ser superadas por medio de la tecnología. Se parte de la ideología transhumanista liberal, donde el camino hacia un futuro poshumano se sucederá de forma espontánea como consecuencia de la necesidad de crecimiento económico del capitalismo. Es la continuidad del capitalismo actual (preservar al capitalismo).
3. Capitalismo progresista. Es consecuencia del anterior, pero con un enfoque más humano o democrático y sigue las ideas de un transhumanismo democrático expuestas por James Hughes, un poco como oposición a la ideología del transhumanismo liberal. Aunque se plantea dentro del capitalismo se proponen realizar ciertas reformas en lo social, lo ecológico y lo económico (democratización del capitalismo)
4. Ecologismo. Parte de que la especie humana está en peligro de extinción y es necesario tomar medidas ecológicas para su protección, y propone una ideología ecologista donde el ser humano no es el centro del universo sino otro integrante más como el resto de los seres vivientes. Se necesita de una cambio de mentalidad que vaya del egocentrismo actual hacia un biocentrismo, algunas posiciones más radicales, proponen un crecimiento cero y hasta de un retorno a la naturaleza (pesimismo ecologista)
5. Socialismo ecológico. Aquí se unen las ideas del socialismo con las del ecologismo pero menos radicales. Se asumen las ideas del desarrollo sostenible y aspira a un crecimiento económico sin degradar al planeta y cono mejoras sociales. Todo indica que los esfuerzos del socialismo moderno, además de las mejoras sociales, deben estar encaminados a tratar de resolver la crisis ecológica actual (ecologismo social)
6. Socialismo progresista. Parte del concepto de que el ser humano no ha alcanzado todo su potencial evolutivo y por medio de su propia fuerza interior y la formación de una consciencia social que acepte la responsabilidad sobre el planeta, sobre las especies y sobre sí mismo, en aras de su propio progreso humano; que incluya relaciones profundas, que sustituyan las relaciones superficiales actuales basadas en la competencia, y que se establezca no solo entre humanos sino, también, entre humanos y tecnologías colaborativas (sostenibilidad tecnológica), siguiendo un enfoque transdisciplinar (colaboración transdisciplinar).

Las posiciones 1, 2 y 3 defienden la idea de un futuro poshumano, mientras las posiciones 4, 5 y 6, la de un futuro sostenible.

Si antes las únicas formas de transformar al mundo, a la sociedad, al individuo, etc. Eran: o los cambios en la estructura social (ej. El socialismo), o los cambios en la mentalidad (ej. El cristianismo). Hoy tenemos un nuevo competidor, que promete cambiar tanto a la sociedad, al individuo, como al mundo: las tecnologías (de esto hemos hablado artículos anteriores y por su puesto en mi libro: “Inteligencia artificial, el futuro del hombre”). En estos momentos, estamos ante el surgimiento de una nueva superestructura tecnológica donde el progreso parece imponerse, con o sin los humanos. La elección nos pertenece a todos.

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Hasta mediados del siglo XX, el desarrollo se producía por un solo paradigma u ola que arrastraba hacia los cambios. El siglo XX vio nacer las tecnologías de la información y el paradigma de la sociedad de la información, llamado por otros la sociedad basada en el conocimiento. En el presente muchas organizaciones, siguen haciendo énfasis en atacar a los efectos (disminuir los problemas), por lo que los esfuerzos se están únicamente, enfocando hacia la sociedad del conocimiento y casi todos los programas (por no ser absolutos) están ajenos al nuevo paradigma de la convergencia tecnológica y la necesidad de estar preparados para el impacto social, económico y cultural que tendrán sobre la humanidad.

Ahora en pleno siglo XXI, al paradigma de las tecnologías de la información se le están uniendo un nuevo paradigma que amenaza con convertirse en tsunami y arrastrar con todas las formas convencionales tal como las conocemos hoy, el de la convergencia de las tecnologías : nano, bio, info y cogno (NBIC)

A partir de la revolución científico-técnica se consideran las siguientes eras:

  • Siglo XIX: Era de las máquinas.
  • Siglo: XX: Era de las tecnologías de la información
  • Siglo XXI: Era de las tecnologías convergentes, encabezada por la nanotecnología y la biotecnología.

La era de las maquinas ha transitado por las siguientes fases o tendencias.

  • La máquinas manipuladas por los humanos.
  • Las máquinas autómatas, se manipulan a sí misma para acciones mecánicas (un reloj) o algorítmicas (un robot).
  • Las máquinas inteligentes basadas en programas que le permite ejecutar acciones inteligentes (como jugar ajedrez) pero hasta el presente son manipuladas por los humanos.

En una próxima fase se espera la creación de maquinas inteligentes autónomas, capaces de ejecutar acciones por si misma sin necesidad de los humanos, mientras la última fase serán las máquinas que se auto construyen a sí mismas. Lo cual las conducirá a la independencia total de los humanos. Para algunos este será el fin de la humanidad.

Las tecnologías de la información tienen tres grandes vertientes:

  • La comunicación: Internet, tecnología móvil,
  • Las computadoras: Miniaturización y la computación ubicua.
  • El software: Que van abarcando todas las actividades humanas.

Expectativas sobre las tecnologías. Sus riesgos.

  1. Las tecnologías como fuente de dominio y poder en manos de unos pocos. La elite de poder aspira a mantener el dominio y control sobre las tecnologías. El problema radica, en quien controla el uso que se le pueda dar. Lo que nos puede llevar al exterminio de toda la humanidad ya sea por un uso irresponsable que contamine y destruya la vida o por guerras.
  2. La tecnología con crecimiento acelerado (singularidad tecnológica) capaz de alcanzar la autonomía y superar a los humanos. Los transhumanistas ven como única solución la fusión entre humanos y tecnología. Se parte de la competencia entre humanos y maquinas por el mismo espacio vital. Esto nos lleva al auto exterminio de la humanidad.
  3. Las tecnologías como un medio que permite el mejoramiento de la humanidad tanto intelectual como espiritual y que la misma puede crecer indefinidamente integrándose al contexto humano. Se busca la cooperación entre humanos y tecnologías en lugar de la competencia entre ambas.

El último punto nos lleva a un cambio de mentalidad y a un nuevo enfoque sobre nosotros mismo y a la responsabilidad sobre nuestro pensamiento y nuestras acciones. Donde debemos definir nuestra posición ante la naturaleza (como amos o protectores), nuestro compromiso con toda la humanidad y con las generaciones venideras así como nuestra relación con la tecnología. Nuestro pensamiento actual y nuestro contexto socioeconómico basado en la lucha por el poder, nos llevan inevitablemente a la competencia y a la confrontación no solo entre humanos sino también entre humanos y maquinas.

Tecnologías convergentes y transdisciplinaridad

El término Tecnologías Convergentes, NBIC, –nanotecnología, biotecnología, informática y ciencias cognitivas se refiere al estudio interdisciplinario de las interacciones entre sistemas vivos y sistemas artificiales para el diseño de nuevos dispositivos que permitan expandir o mejorar las capacidades cognitivas y comunicativas, la salud y las capacidades físicas de las personas y en general producir un mayor bienestar social. El carácter distintivo de las NBIC radica en la contribución sinérgica de la nanotecnología sobre las otras tres disciplinas y la fuerte complementariedad de las cuatro en torno al estudio y a las posibilidades de manipulación. Controlada de las interacciones entre sistemas vivos y artificiales.

Aquí estamos ante un fenómeno nuevo donde cada tecnología por separado tiene su propio desarrollo y tendencia natural de crecimiento, lo cual sería posible predecir, como ya vimos en algunas de las tendencias, pero como predecir lo que sucederá con la convergencia de las tecnologías. Hasta ahora nos hemos enfrentados a olas de cambios (paradigmas tecnológicos) pero estamos próximos a enfrentarnos a tsunami de consecuencias impredecibles de los que a su paso irán cambiando a la sociedad, a la encomia, a la naturaleza y al propio ser humano.

Finalmente tenemos, que a las ideas anteriores de maquinas inteligentes, maquinas autónomas, maquinas que se auto construyen, ahora se incorpora el de maquinas que al hacerse cada vez más complejas llegan a emerger como una inteligencia no humana, se pone como ejemplo que ya las maquinas vencen al campeón mundial de ajedrez. Una idea que ha cobrado fuerza entre las tecno-utopías del futuro es la maquinas que se construyen a si misma cada vez más inteligentes hasta superar a los humanos.

Podemos pensar que la tecnología será siempre una herramienta de poder en manos del hombre. Como hasta ahora y estará sujeta al uso que se le dé (mal uso con fines de dominio). Pero estamos hablando de una tecnología que incrementa su poder de exterminio a límites nunca imaginados. En un mundo cada vez más desigual donde el poder (de exterminar al planeta y a la raza humana) se concentra en unos pocos.

¿Puede nuestro pensamiento y enfoque actual enfrentar estos cambios? ¿Seremos arrastrados por un desarrollo tecnológico fuera de control? En palabras de Edgar Morin: “nuestro destino está en juego”. Y tal vez la única forma de enfrentar este desafió sea desde un pensamiento complejo basado en un enfoque transdisciplinar.

Todo esto apunta hacia una crisis entre humanos y tecnología, crisis producto de una ideología transhumanista que ignora al resto de los grandes desafíos de la humanidad e ignora al resto de las crisis que estamos y deberemos seguir enfrentado durante este siglo. Ya que estamos enfocados a la crisis económica subestimando al resto de las crisis e ignorando la complejidad y las causas comunes a todos los problemas. Ejemplo de este pensamiento ingenuo y simplista fue el Francis Fukuyama, quien escribiera el libro “el fin de la historia” y estaba convencido de que el capitalismo, tal como se conoce seguirá tranquilamente existiendo por los siglos de los siglos, cambio de opinión cuando leyó sobre el transhumanisno, los avances de la biotecnología y la nanotecnología, por lo que adquirió otro punto de vista que lo que lo llevo a decir: “el transhumanismo es la idea más peligrosa del mundo”. Y desde entonces no ha dejado de escribir artículos donde manifiesta su preocupación, ya no por el fin de la historia, sino por el fin de toda la humanidad (sobre esto escribiremos en un próximo artículo).

¿En qué dirección nos estamos moviendo? Teniendo en cuenta la complejidad del mundo en que vivimos y las amenazas que provienen del injusto orden mundial, de un capitalismo depredador que consume todos los recursos del planeta y ante el vació espiritual que experimenta la humanidad. Se necesita de un enfoque transdisciplinario no solo para enfrentar la convergencia de las tecnologías y su impacto social sino, también, la convergencia entre las crisis actuales a las cuales no se la encontrado ninguna solución y son vistas desde enfoques parciales y simplistas, esta convergencia entre las crisis espiritual, social, económica, ambiental y tecnológica nos puede llevar a la crisis perfecta y con ello al derrumbe de todas las estructuras hasta hoy vigentes e incluso a la extinción de la humanidad tal como la conocemos hoy.

Inteligencia Artificial, el futuro del hombre

 

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1. El escenario:

La Inteligencia Artificial.Durante los primeros años la Inteligencia Artificial (IA) se fundamentó en el desarrollo de programas que fueran capaces de realizar actividades propias de la mente humana, tales como demostrar teoremas, jugar a las damas, al ajedrez, darle soluciones a problemas poco estructurados basados en la heurística o en campos donde se requería de conocimientos, los sistemas expertos. Esta vía para lograr una inteligencia no humana, para muchos era demasiado lenta y no cumplía con las expectativas. Muchas esperaban haber creado una inteligencia no humana en los 80s. Se puede decir que a finales de los 80s y principio de los 90s muchos investigadores comenzaron a desesperarse y no fueron pocos los que abandonaron sus laboratorios por líneas de trabajo más prometedoras.

Sentimiento de fracaso que invadió tanto a la IA débil como a la IA fuerte. Para la débil cuyo objetivo era crear sistemas informáticos que realizasen actividades que requerían de inteligencia tales como los sistemas expertos, en los cuales se cifraron grandes esperanzas tanto investigativas como comerciales, se esperaba que el mercado estuviera abarrotado de sistemas expertos, incluso los metódicos japoneses, para no ser menos, se lanzaron en su famoso proyecto de 5ta. Generación que también quedo como otro intento más. Por su parte la fuerte cuyo propósito es reproducir en la máquina la extensa variedad, sutileza y profundidad de la inteligencia humana, no logro cumplir con sus metas de en menos de 20 años haber reproducido la mente humana y estaban atascados en modelos muy elementales de la inteligencia, como el mundo de bloques y en sistemas cerrados que eran incapaces de mostrar iniciativa o fallaban estrepitosamente ante cualquier problema que requiriera de sentido común.

2. Nuevos actores: Vingen y Kurzweil

Comenzaremos con el norteamericano Vernor Vingen, quien vaticina que la creación de entidades con inteligencia mayor que la humana será una realidad, antes del 2030. Este autor le da más importancia al hardware de la computadora que a sus programas y se concentra en la creación de máquinas inteligentes independientes de sí emulan la mente humana Y afirma, que existen otros caminos diferentes a la IA para llegar a la superhumanidad a la cual él le llama amplificación de la inteligencia, la misma se esta sucediendo de una forma natural, cada vez que se mejora nuestra capacidad para acceder a la información y para comunicarnos. Esto nos lleva a la conclusión de una inteligencia “emergente” que podrá surgir de un momento a otro.

Por otra parte, Vingen, considera que el poder y la influencia de Internet están siendo muy poco considerada: “La total anarquía de la red mundial es una evidencia de su potencial. A medida que crecen la conectividad, el ancho de banda, el tamaño de la capacidad de archivo y la velocidad de proceso (su habilidad para comunicarse en anchos de banda variables, incluyendo algunos mucho más elevados que la voz o los mensajes escritos). ¿Qué pasará cuando partes de un ego pueden ser copiadas y unidas a otras, cuando la autoconciencia puede aumentar o disminuir para aproximarse a la naturaleza del problema bajo consideración? Es algo parecido a una biosfera recapitulada como un procesador de datos, pero un millón de veces más rápida y con millones de humanos como agentes inteligentes (Nosotros mismos)”.

Vingen también propone una inteligencia superhumana fuerte, la cual podría parecerse a una Sociedad de la Mente (idea de Minsky) con varios componentes muy calificados, donde algunos de esos “equivalentes humanos” podrían ser usados nada más que para procesamiento digital de señales. Y agrega: “para aquellos que no hayan cambiado (los que decidan seguir siendo humanos) el logro será un trato benigno, quizás dándoles la apariencia de ser los dueños de unos semidioses esclavos (las máquinas superinteligentes)”.

El reduccionismo siempre estará en la mente de todo científico y Ray Kurzweil toma la idea de la ingeniería inversa y la aplica a los procesos de la mente. Y dice: Un ordenador es más rápido que el cerebro humano en algunas cosas, pero lo difícil es que tenga la riqueza, sutileza y profundidad de nuestro pensamiento. Para lograrlo será clave el software de la inteligencia, basado en la ingeniería inversa, que copia el funcionamiento del cerebro humano. Nuestros circuitos cerebrales son tridimensionales y se basan en unas complejísimas conexiones. Escaneando el cerebro podremos crear una réplica, y usando circuitos artificiales tridimensionales de nanotubos (tubos microscópicos) podremos imitar su funcionamiento y crear una inteligencia artificial avanzada. El profesor norteamericano Andreas Nowatzyk ya trabaja en un proyecto para copiar el cerebro de un ratón. Es un primer paso para lo que vendrá luego.

Al igual que Vingen no ve limites al desarrollo tecnológico el cual absorbe a todas las actividades humanas. Y apuesta por una evolución tecnológica que rompa con la lenta evolución biológica. Y afirma que muchos científicos tienen una perspectiva lineal y ven el futuro como un calco retocado del pasado. Eso es un error. Estamos en una fase de crecimiento exponencial en la que confluyen la informática, la biotecnología, la física cuántica, la nanotecnología… Este siglo será equivalente a 20.000 años de desarrollo lineal.

Entre sus numerosas predicciones se encuentran escanear el cerebro para luego instalarlo en otro medio no biológico, así como lograr la inmersión total virtual. Y cree que los entornos de realidad virtual integrarán todos los sentidos y a la vez serán capaces de mejorar la inteligencia; se podrá pensar más rápido, tener pensamientos más complejos y tele cargar el conocimiento, y sueña con que estos entornos de realidad virtual entre el 2030 y el 2040 compitan con los entornos reales.

3. Que piensa el padre de la Inteligencia Artificial

Minsky quien fuera uno de los fundadores de la IA, junto a John McCarthy y líder de los “zarrapastrosos” junto a Schank (así se les llamaba a los investigadores que defendían la represetanción semántica en contraposición a los “pulcros” que abogaban por una representación lógica) desde donde defendía la idea de una IA lo más cerca posible al pensamiento humano y se oponía al formulismo frío de la lógica, resulte ser ahora uno de los paladines de la sustitución del hombre por las máquinas.

Minsky quien no puede ocultar su decepción con la inteligencia artificial dice: “La IA está en un estado risible, debido a que podemos hacer que las máquinas hagan el tipo de cosas que hace un “experto”, pero aún no podemos lograr que hagan la mayor parte de las cosas que puede hacer un niño de 4 años. Aunque reconoce que la IA se atasco, anuncia que esta solo se ha detenido por un momento. Y dice: Hacia 1980 el progreso se detuvo en cierta forma y la gente se dispersó en otras direcciones para tratar de encontrar alguna vía de volver.

Minsky ya en su vejez, parece darle más importancia a la inmortalidad que al propio sentido ético de lo que propone, de ahí que diga: “Hasta ahora hemos tendido a vernos como producto final de la evolución, pero la evolución no ha cesado. La verdad es que ahora estamos evolucionando más rápidamente aunque por el lento procedimiento darwinista. Ya es hora de que empecemos a pensar en nuestras nuevas identidades, que están aflorando. Podemos comenzar a diseñar sistemas fundados en un tipo ingenioso de selección innatural, capaces de sacar partido de características adquiridas”. Y agrega: “Estamos en una era primitiva, en la cual las máquinas no tienen perspectiva del futuro, ni “valores familiares básicos”. Y sí, tengo que insistir que esta ciencia llevará a la extensión de nuestro lastimoso tiempo de vida”.

Con respecto al sentido ético de sus ideas, afirma que es tan malo que si insiste en él va a ser peor. Y propone, no sin razón, que la ética debe venir de gente que sepa de eso. Y agrega: No creo que sea bueno pedirle a los científicos que entiendan las consecuencias de su trabajo, porque no pueden. Y los justifica diciendo: Pasan todo su tiempo pensando en su trabajo, así que no piensan en la ética o en las consecuencias.

Y concluyo con un párrafo de mi libro Inteligencia Artificial, el futuro del hombre: “En el futuro surgirán nuevas tendencias basadas en la cooperación de todas las inteligencias (nadie sabe cuantas ni como serán), y surgirán nuevas profesiones que tendrán que ver con las inteligencias no humanas, y sobre todo, creo, se intensificarán los estudios sobre la inteligencia humana: psicología, neurofisiología, antropología, sociología, parasicología y otras. Es totalmente racional pensar que el hombre ante la superinteligencia de las máquinas trate de comprender su propia humanidad y sienta mas que nunca la necesidad de conocer su propio cerebro (lo irracional sería que el hombre se dedicara a adorar a las máquinas como dioses). Las máquinas a su vez le servirán al hombre como impulsoras de nuevas fuerzas creativas, este al no tener que dedicarse a las actividades rutinarias… más tiempo para darle un uso más eficiente a su cerebro, o será el hombre tan torpe que en lugar de perfeccionar su sistema educativo buscando ser cada vez mas creativo, se aferre como única solución a la perfección de las máquinas, cuando en realidad ambos pueden ser mejores y ambos tanto las máquinas como los humanos dependen de la capacidad del individuo como ser social”.