Futuro del hombre

Futuro del hombre

0

La relación entre humanos y tecnologías, cada vez, se hace más compleja, y es que las tecnologías van dejando de ser un medio para convertirse un fin en sí mismas. Según nos vayamos acercando a la construcción de una superestructura social donde humanos y tecnologías comparten las decisiones.

El problema radica, en ¿cómo van a incorporarse las tecnologías al progreso humano? ¿Sabemos hacia dónde vamos? Podemos creer ciegamente en un futuro luminoso, si ni siquiera tenemos el control de nuestras vidas. Hoy sabemos que nuestra actitud hacia el planeta era errónea, que vivimos en un planeta finito que se deteriora rápidamente por la acción humana, que vivimos en red y que las crisis se propagan cada vez con más rapidez y que el mundo cada vez se hace más amenazado e inseguro, y lo peor que la amenaza proviene del propio ser humano.

Hoy se ha puesto de moda el término: riesgos existenciales los cuales se refieren al surgimiento de una situación amenazante de carácter terminal y alcance global que pone en peligro la existencia humana y su característica más peligrosa es que la humanidad no cuenta con mecanismos efectivos para su control. Según el filósofo sueco Nick Bostrom, lo que está en juego no puede ser más importante: si nos equivocamos, éste puede ser el último siglo de la humanidad.

¿Cuáles son los mayores peligros?

Según el Centro para el Estudio de Riesgo existencial de la Universidad de Cambridge las “cuatro grandes amenazas” a la especie humana son: la inteligencia artificial, el cambio climático, la guerra nuclear y la biotecnología.

1. La biotecnología
La biotecnología podría conducir a la creación de una pandemia, una guerra química podría ser llevada al extremo, la nanotecnología podría conducir a la plaga gris en la que robots auto-replicantes, fuera de control, consumen toda la materia viva en la tierra, mientras se reproducen de forma acelerada. En ambos casos, ya sea deliberadamente o por accidente.

La biología sintética, en la que la biología se encuentra con la ingeniería, promete importantes beneficios médicos. Seán O’Heigeartaigh, un experto en evolución molecular, desconfía de las buenas intenciones mal informadas, pues en los experimentos se hacen modificaciones genéticas, desmantelando y reconstruyendo las estructuras genéticas. “Lo más probable es que no se propongan hacer algo dañino”, apunta, pero subraya que siempre existe el peligro de que se dispare una secuencia de eventos no anticipada o de que algo se torne nocivo cuando se transfiera a otro ambiente.

La nanotecnología, trabajar a nivel molecular o atómico, también podría tornarse en algo altamente destructivo si se usa para la guerra, apunta Bostrom. Por ello, escribió que los gobiernos futuros enfrentarán el gran reto de controlar y restringir su mal uso.

2. La inteligencia artificial
La manera en la que la inteligencia artificial interactuará con el mundo exterior es otro de los temores. Esa “inteligencia” informática puede ser una herramienta poderosa para la industria, medicina, agricultura o el manejo de la economía. Pero también es completamente indiferente a cualquier perjuicio fortuito. Daniel Dewey, quien se enfoca en superinteligencia artificial, habla de una “explosión de inteligencia” en la que el poder acelerado de las computadoras se vuelve menos predecible y controlable. “La inteligencia artificial es una de las tecnologías que pone más y más poder en paquetes más y más pequeños”.

Los robots, representan otra seria amenaza; han ido adquiriendo diversas formas de semi-autonomía, además de ser capaz de encontrar fuentes de energía por su cuenta y poder elegir de forma independiente los objetivos a atacar con armas. Algunos expertos y académicos han cuestionado el uso de robots de combate militar, sobre todo cuando estos robots se les da un cierto grado de funciones autónomas.

Nick Bostrom sugirió que en la búsqueda de la humanidad el conocimiento podría inadvertidamente crear un dispositivo que podría destruir la Tierra y nuestro sistema solar.

3. La guerra nuclear
Los escenarios que se han explorado con mayor frecuencia son la guerra nuclear y los dispositivos Doomsday. Hay dificultad para predecir si esa sería exterminar a la humanidad, sin embargo, un invierno nuclear causaría conmoción considerable en las civilizaciones avanzadas.

4. El cambio climático
Mientras las anteriores pueden suceder, este ya está sucediendo. Los anteriores son una acumulación de conocimientos y desarrollo de aplicaciones peligrosas que pueden desencadenar en la destrucción del planeta. Aquí estamos hablando de los efectos que se están produciendo producto del uso negligente de las tecnologías.

Según las Naciones Unidas, los desastres climáticos van en aumento y alrededor del 70 por ciento son de parición reciente. Estos desastres se hacen cada vez más difíciles de controlar y tienen cada vez un precio más alto.
• En la última década 2,4 millones de personas se vieron afectadas por desastres relacionados con el clima.
• El coste de la respuesta a los desastres se ha multiplicado por diez entre 1992 y 2008.
• Destructivas fuertes lluvias repentinas, intensas tormentas tropicales, inundaciones y sequias repetidas están aumentando.
• El aumento del nivel del mar.

El calentamiento global, se refiere al calentamiento causado por la tecnología humana desde el siglo XIX y se refleja las variaciones anormales en el clima tale como: el aumento de los mares, derretimiento de glaciares, sequías, etc. Se ha sugerido que el calentamiento global fuera de control puede convertir a la Tierra en un planeta caliente como Venus. En situaciones menos extremas podría provocar que el fin de la civilización tal como la conocemos.

Estamos pasando de una estructura social competitiva a una superestructura social, también competitiva, donde las tecnologías se integraran a nuestro contexto, caracterizado por la competencia y a la lucha por el poder, donde el libre mercado es el motor impulsor del progreso, un progreso que no contempla a todos por igual.

Hoy se habla de una Tecnoética, de una bioética global, de una meta-tecnología, pero todo apunta al mismo problema la necesidad de no ir a ciegas al futuro. No se puede caer en el optimismo de una singularidad tecnológica, tan deslumbrado por un futuro donde las tecnologías superan a la inteligencia humana, que no ve los grandes problemas del presente y el peligro que encierra una tecnología cada vez más potente y destructiva, a merced de un sistema consumista, cuya negligencia (para ser benignos) incita a la ganancia a toda costa sin importar los riesgos ni la destrucción, a que esto, podría conducirnos.

0

El progreso tecnológico ha ido pasando de las herramientas, las máquinas manejadas por el hombre, a las máquinas autónomas cada vez más inteligentes (según avancen las técnicas de inteligencia artificial) que irán inevitablemente formando parte de la vida social de los humanos, ya no como herramientas o máquinas (automóviles, computadoras, grúas, etc.) sino como máquinas superinteligentes capaces de tomar decisiones junto a los humanos. Ahora, la pregunta es: ¿estamos preparado para ese futuro?

En el sitio The Millennium Project, se plantea la necesidad de una ética global ante la aceleración tecnológica que se está produciendo que va más allá de los medios convencionales de evaluación ética y se plantea la necesidad de sistemas éticos que se anticipen a los posibles eventos futuros. Y señala, como preocupación, el hecho de que una sola persona, pueda alcanzar un poder masivamente destructivo, ya que las tecnologías destructivas están al alcance de cualquiera que las pueda comprar y el acceso a la información ya no es un problema, hoy casi todo se puede encontrar en Internet. Sin, dudas el terrorismo es una de las mayores amenazas de este siglo.

Otros hablan del peligro de una tecnología ciega. Que no es otra cosa que una tecnología que avanza en la historia sin un conocimiento profundo del territorio natural, biológico, humano y social en que se mueve. Es el uso negligente de las tecnologías (con fines de lucro, militares, etc.) que ignora las consecuencias de sus actuaciones y actúa al margen de ellas.

Y como consecuencia de esta tecnología ciega, se citan las siguientes consecuencias: el problema de la contaminación, la destrucción de los recursos naturales, el cambio climático, de extinción de especies animales, la alteración de la biosfera, etc.

Por su parte, Miguel Ángel Gutiérrez, realiza el siguiente cuestionamiento: “¿Cuál es el límite de las tecnologías? Ninguna de ellas queda confinada a la función que su creador original imaginó; las tecnologías se entrecruzan, se potencian, se modifican y generan nuevas aplicaciones, por lo que se hace necesario conocer cuáles pueden ser sus consecuencias, más allá del producto o servicio que la incorporen inicialmente.

Hasta el super optimista y experto en inteligencia artificial, Ray Kurzweil, muestra cierta preocupación cuando dice: “No podemos depender de enfoques de ‘prueba y error’ para tratar los riesgos existenciales… Tenemos que incrementar enormemente nuestra inversión para desarrollar tecnologías defensivas específicas… Estamos hoy en la fase crítica de la biotecnología, y alcanzaremos la fase en la que tendremos que implementar directamente tecnologías defensivas para la nanotecnología en los últimos años de la próxima década… Un patógeno autoreplicante, ya sea biológico o basado en la nanotecnología, podría destruir nuestra civilización en cuestión de días o semanas.”

Esto es solo una introducción en el próximo artículo iremos entrando en detalles. El tema está abierto…

0

1. El escenario:

La Inteligencia Artificial.Durante los primeros años la Inteligencia Artificial (IA) se fundamentó en el desarrollo de programas que fueran capaces de realizar actividades propias de la mente humana, tales como demostrar teoremas, jugar a las damas, al ajedrez, darle soluciones a problemas poco estructurados basados en la heurística o en campos donde se requería de conocimientos, los sistemas expertos. Esta vía para lograr una inteligencia no humana, para muchos era demasiado lenta y no cumplía con las expectativas. Muchas esperaban haber creado una inteligencia no humana en los 80s. Se puede decir que a finales de los 80s y principio de los 90s muchos investigadores comenzaron a desesperarse y no fueron pocos los que abandonaron sus laboratorios por líneas de trabajo más prometedoras.

Sentimiento de fracaso que invadió tanto a la IA débil como a la IA fuerte. Para la débil cuyo objetivo era crear sistemas informáticos que realizasen actividades que requerían de inteligencia tales como los sistemas expertos, en los cuales se cifraron grandes esperanzas tanto investigativas como comerciales, se esperaba que el mercado estuviera abarrotado de sistemas expertos, incluso los metódicos japoneses, para no ser menos, se lanzaron en su famoso proyecto de 5ta. Generación que también quedo como otro intento más. Por su parte la fuerte cuyo propósito es reproducir en la máquina la extensa variedad, sutileza y profundidad de la inteligencia humana, no logro cumplir con sus metas de en menos de 20 años haber reproducido la mente humana y estaban atascados en modelos muy elementales de la inteligencia, como el mundo de bloques y en sistemas cerrados que eran incapaces de mostrar iniciativa o fallaban estrepitosamente ante cualquier problema que requiriera de sentido común.

2. Nuevos actores: Vingen y Kurzweil

Comenzaremos con el norteamericano Vernor Vingen, quien vaticina que la creación de entidades con inteligencia mayor que la humana será una realidad, antes del 2030. Este autor le da más importancia al hardware de la computadora que a sus programas y se concentra en la creación de máquinas inteligentes independientes de sí emulan la mente humana Y afirma, que existen otros caminos diferentes a la IA para llegar a la superhumanidad a la cual él le llama amplificación de la inteligencia, la misma se esta sucediendo de una forma natural, cada vez que se mejora nuestra capacidad para acceder a la información y para comunicarnos. Esto nos lleva a la conclusión de una inteligencia “emergente” que podrá surgir de un momento a otro.

Por otra parte, Vingen, considera que el poder y la influencia de Internet están siendo muy poco considerada: “La total anarquía de la red mundial es una evidencia de su potencial. A medida que crecen la conectividad, el ancho de banda, el tamaño de la capacidad de archivo y la velocidad de proceso (su habilidad para comunicarse en anchos de banda variables, incluyendo algunos mucho más elevados que la voz o los mensajes escritos). ¿Qué pasará cuando partes de un ego pueden ser copiadas y unidas a otras, cuando la autoconciencia puede aumentar o disminuir para aproximarse a la naturaleza del problema bajo consideración? Es algo parecido a una biosfera recapitulada como un procesador de datos, pero un millón de veces más rápida y con millones de humanos como agentes inteligentes (Nosotros mismos)”.

Vingen también propone una inteligencia superhumana fuerte, la cual podría parecerse a una Sociedad de la Mente (idea de Minsky) con varios componentes muy calificados, donde algunos de esos “equivalentes humanos” podrían ser usados nada más que para procesamiento digital de señales. Y agrega: “para aquellos que no hayan cambiado (los que decidan seguir siendo humanos) el logro será un trato benigno, quizás dándoles la apariencia de ser los dueños de unos semidioses esclavos (las máquinas superinteligentes)”.

El reduccionismo siempre estará en la mente de todo científico y Ray Kurzweil toma la idea de la ingeniería inversa y la aplica a los procesos de la mente. Y dice: Un ordenador es más rápido que el cerebro humano en algunas cosas, pero lo difícil es que tenga la riqueza, sutileza y profundidad de nuestro pensamiento. Para lograrlo será clave el software de la inteligencia, basado en la ingeniería inversa, que copia el funcionamiento del cerebro humano. Nuestros circuitos cerebrales son tridimensionales y se basan en unas complejísimas conexiones. Escaneando el cerebro podremos crear una réplica, y usando circuitos artificiales tridimensionales de nanotubos (tubos microscópicos) podremos imitar su funcionamiento y crear una inteligencia artificial avanzada. El profesor norteamericano Andreas Nowatzyk ya trabaja en un proyecto para copiar el cerebro de un ratón. Es un primer paso para lo que vendrá luego.

Al igual que Vingen no ve limites al desarrollo tecnológico el cual absorbe a todas las actividades humanas. Y apuesta por una evolución tecnológica que rompa con la lenta evolución biológica. Y afirma que muchos científicos tienen una perspectiva lineal y ven el futuro como un calco retocado del pasado. Eso es un error. Estamos en una fase de crecimiento exponencial en la que confluyen la informática, la biotecnología, la física cuántica, la nanotecnología… Este siglo será equivalente a 20.000 años de desarrollo lineal.

Entre sus numerosas predicciones se encuentran escanear el cerebro para luego instalarlo en otro medio no biológico, así como lograr la inmersión total virtual. Y cree que los entornos de realidad virtual integrarán todos los sentidos y a la vez serán capaces de mejorar la inteligencia; se podrá pensar más rápido, tener pensamientos más complejos y tele cargar el conocimiento, y sueña con que estos entornos de realidad virtual entre el 2030 y el 2040 compitan con los entornos reales.

3. Que piensa el padre de la Inteligencia Artificial

Minsky quien fuera uno de los fundadores de la IA, junto a John McCarthy y líder de los “zarrapastrosos” junto a Schank (así se les llamaba a los investigadores que defendían la represetanción semántica en contraposición a los “pulcros” que abogaban por una representación lógica) desde donde defendía la idea de una IA lo más cerca posible al pensamiento humano y se oponía al formulismo frío de la lógica, resulte ser ahora uno de los paladines de la sustitución del hombre por las máquinas.

Minsky quien no puede ocultar su decepción con la inteligencia artificial dice: “La IA está en un estado risible, debido a que podemos hacer que las máquinas hagan el tipo de cosas que hace un “experto”, pero aún no podemos lograr que hagan la mayor parte de las cosas que puede hacer un niño de 4 años. Aunque reconoce que la IA se atasco, anuncia que esta solo se ha detenido por un momento. Y dice: Hacia 1980 el progreso se detuvo en cierta forma y la gente se dispersó en otras direcciones para tratar de encontrar alguna vía de volver.

Minsky ya en su vejez, parece darle más importancia a la inmortalidad que al propio sentido ético de lo que propone, de ahí que diga: “Hasta ahora hemos tendido a vernos como producto final de la evolución, pero la evolución no ha cesado. La verdad es que ahora estamos evolucionando más rápidamente aunque por el lento procedimiento darwinista. Ya es hora de que empecemos a pensar en nuestras nuevas identidades, que están aflorando. Podemos comenzar a diseñar sistemas fundados en un tipo ingenioso de selección innatural, capaces de sacar partido de características adquiridas”. Y agrega: “Estamos en una era primitiva, en la cual las máquinas no tienen perspectiva del futuro, ni “valores familiares básicos”. Y sí, tengo que insistir que esta ciencia llevará a la extensión de nuestro lastimoso tiempo de vida”.

Con respecto al sentido ético de sus ideas, afirma que es tan malo que si insiste en él va a ser peor. Y propone, no sin razón, que la ética debe venir de gente que sepa de eso. Y agrega: No creo que sea bueno pedirle a los científicos que entiendan las consecuencias de su trabajo, porque no pueden. Y los justifica diciendo: Pasan todo su tiempo pensando en su trabajo, así que no piensan en la ética o en las consecuencias.

Y concluyo con un párrafo de mi libro Inteligencia Artificial, el futuro del hombre: “En el futuro surgirán nuevas tendencias basadas en la cooperación de todas las inteligencias (nadie sabe cuantas ni como serán), y surgirán nuevas profesiones que tendrán que ver con las inteligencias no humanas, y sobre todo, creo, se intensificarán los estudios sobre la inteligencia humana: psicología, neurofisiología, antropología, sociología, parasicología y otras. Es totalmente racional pensar que el hombre ante la superinteligencia de las máquinas trate de comprender su propia humanidad y sienta mas que nunca la necesidad de conocer su propio cerebro (lo irracional sería que el hombre se dedicara a adorar a las máquinas como dioses). Las máquinas a su vez le servirán al hombre como impulsoras de nuevas fuerzas creativas, este al no tener que dedicarse a las actividades rutinarias… más tiempo para darle un uso más eficiente a su cerebro, o será el hombre tan torpe que en lugar de perfeccionar su sistema educativo buscando ser cada vez mas creativo, se aferre como única solución a la perfección de las máquinas, cuando en realidad ambos pueden ser mejores y ambos tanto las máquinas como los humanos dependen de la capacidad del individuo como ser social”.

0

Podemos decir que existen dos grandes bandos, los que creen que las tecnologías serán la solución a todos los problemas (tecnologistas) y los que creen que son un peligro y que hay que controlarlas. Siempre existe una masa oscilante que no toma partido  y que cree que todo seguirá igual, pero que en cualquier momento toma partido de un de los dos bandos. Y nunca puede faltar una tercera posición que busca encontrar un equilibrio entre ambas.

Es una abstracción (muy utilizada, incluso por mi) decir que el enfrentamiento bio-político por controlar la vida será un enfrentamiento entre transhumanistas y bioconservadores,  en realidad es un enfrentamiento entre empresas transnacionales y organismos transnacionales. Pienso que el destino de la humanidad dejará de ser solo una discusión entre empresas transnacionales y organismo transnacionales, y que un nuevo actor ira tomando cada vez más fuerza: las comunidades transnacionales (ver impacto de las redes sociales).

Las diferentes ideologías

Las ideologías no escapan a la dimensión humana bio-psico-social (dejamos fuera a la tecnológica) por lo que han existido tres grandes ideologías globales

·         Ideología religiosa (psiquis) – cristianos, budista, mahometanos, etc.

·         Ideología social (sociedad) – socialismo, comunismo, social democracia, etc.

·         Ideología ecológica (medio ambiente) – desarrollo sostenible, ecología profunda, eco-socialismo, etc.

Hoy estamos ante una nueva ideología: La ideología tecnologista y se comienza a asumir una nueva dimensión del problema humano como tecno-bio-psico-social.

Y es que hasta ahora las ideologías se han ido incorporando al sistema social dominante (el capitalismo) en forma de reformas que han ido suavizando las costumbre, al igual que sucedió con la religión en la época esclavista, un ejemplo clásico es la ideología socialista que ha jugado un papel importante en los logros sociales de justicia, igualdad y sobre todo de medidas a favor de la clase obrera.  Se podía esperar otro tanto de la ideología ecologista, que esta viniera a integrarse al progreso tanto humano como tecnológico y se obtuvieran medidas a favor del medio ambiente, sin dudas hubiese sido así, de no ser por otra ideología que cifra sus esperanzas no en la perpetuación de la naturaleza y su sostenibilidad sino en la perpetuación de una especie poshumana y en el advenimiento de una evolución artificial que de hecho rompe con la evolución natural y nos lleva a una nueva interpretación del problema.

Es obvio que si puedo construirme una casa nueva no tengo porque estar preocupándome por la que tengo. Son muchos los tecnologistas que sueñan con construirse nuevos cuerpos, copiar su mente y sustituir lo natural por lo artificial ya que para ellos, tanto el cuerpo, como la mente, como el planeta, ya llegaron a su límite y se han convertido en un freno al progreso “tecnológico” y este es otro fenómeno ya que asumen que el progreso tecnológico incluye al progreso humano o sea limitan este al segundo.

Aquí tenemos un primer enfrentamiento entre una ideología ecologista que quiere preservar lo natural (bioconservadores) y una ideología tecnologista que quiere transformar lo natural hacia lo artificial (transhumanistas) y esto nos lleva a dos escenarios futuros: el futuro sostenible que defienden los bioconservadores encabezada la idea de un desarrollo sostenible y que toma cuerpo en las organizaciones transnacionales (ONU, UNESCO, PNUD, etc) y de la otra parte el futuro poshumano que defienden los transhumanistas y es la idea motriz que siguen, hoy por hoy, las empresas transnacionales de las nuevas tecnologías (IBM, Microsoft, Google, etc). El escenario de la batalla ya esta dispuesto y somos nosotros mismos en cuerpo y alma, el campo de batalla. Ahora la lucha por superar todos los limites naturales.

De esto hablaremos más adelante pero solo para que tengan una idea vamos una comparación entre las características de un futuro poshumano (muy bien definido por Kurzweil) y un futuro sostenible, del cual todavía hay que definir muchas cosas.

Futuro poshumano

  • Superestructura tecnológica poshumana
  • Superestructura social competitiva (mercado)
  • Ideología individual transhumanista
  • Integración del progreso humano (o sustitución) al progreso tecnológico
  • Inmortalidad digital (trascendencia psico-digital)
  • Superinteligencia transhumana
  • Singularidad tecnológica
  • Transformación exterior (tecnologías emergentes)
  • Humano mejorado (por las tecnologías)
  • Transformación tecnológica (presupuestos transhumanistas)

Futuro sostenible (*)

  • Superestructura tecnológica sostenible
  • Superestructura social colaborativa
  • Ideología colectiva transdisciplinar
  • Integración del progreso tecnológico al progreso humano
  • Evolución trascendente (trascendencia tecno-social)
  • Superinteligencia colectiva (cerebro global)
  • Sostenibilidad tecnológica
  • Transformación interior (fuerza interior)
  • Humano pleno
  • Transformación transdisciplinar dentro de una bioética global

( *) La idea de un futuro sostenible y de una bioética transdisiciplinar, siguiendo las ideas de Van R. Potter de una bioética global, es un tema el que estoy trabajando y será motivo de un próximo libro, por supuesto, que lo iré publicando, sucesivamente, en este blog

Si nos remitimos al enfrentamiento entre transhumanistas y biocoservadores tratado en otros artículos de este blog al que le daremos un nuevo enfoque:

Transhumanistas (T)                               Boconservadores (B)

Poshumanistas (singularistas)                   Luditas              

Liberales                                                     Desarrollo sostenible (sociales)

Tecnoprogresitas (democráticos)              Transdisciplinar (progresista)

Los cuales se agrupan a los escenarios de cada futuro como sigue:

Futuro poshumano (superestructura social competitiva – ideología individual)

  • Poshumanismo: Superestructura tecnológica (ideología tecnologista)
  • Transhumanismo: Superestructura tecnológica mercantil (ideología tecno-económica)
  • Tecnoprogresismo: Superestructura tecnológica democrática (ideología tecno-medica)

Futuro sostenible (superestructura social colaborativa – ideología colectiva)

  • Biconservadurismo: Estructura sostenible (ideología ecológica)
  • Desarrollo sostenible: Estructura tecnológica sostenible (ideología eco-social)
  • Bioética transdisciplinar: Superestructura tecnológica sostenible (ideología transdisciplinar – Tecno-Bio-Psico-Social)

No se asusten estas ideas las iré desarrollando en próximos artículos (ahora estoy escribiendo un poco apremiado por el tiempo).

Si tenemos en cuenta que muchos de los defensores del desarrollo sostenible están hablando de la necesidad de un decrecimiento económico, de un mayor control de las tecnologías (principio de precaución), de producciones más seguras y protegidas (lo cual implica más gastos en la inversión) de una disminución del consumo, etc. Sin dudas todo va en contra del ideas de un capitalismo que crece infinitamente (a expensa de la degradación del planeta) y de la idea de una prosperidad y consumismo ilimitado. Lo que nos lleva a pensar en una crisis del capitalismo y del fracaso de su modelo. Todo lo cual obligaría a grandes transformaciones del sistema vigente y de una búsqueda de soluciones socio-ecológicas. Por suerte o por desgracia, las tecnologías vienen a socorrer al decadente modelo actual y traen nuevas esperanzas de un crecimiento ilimitado en una planeta que puede ser reconstruido y sus recursos naturales pueden ser sustituidos por recursos artificiales, incluyendo al hombre. Estamos hablando del poscapitalismo y de un transhumanismo liberal que va tomando cada vez más fuerza en las grandes transnacionales del mercado.

De todo lo anterior se desprende que el enfrentamiento ya se está produciendo entre los organismos transnacionales, las instituciones que representan a los poderes convencionales, tal vez demasiado convencionales para los tiempos que corren, y las empresas transnacionales enfrascadas en la búsqueda de nuevos mercados y en la creación de nuevos productos para una sociedad cada vez mas vacía y desorientada; tal vez, dispuesta a despojarse de su alma, solo para lucir atributos artificiales ajenos a la verdadera esencia humana.

Recomendación:
Inteligencia artificial, el futuro del hombre

0

Durante años se ha repetido que el hombre es una criatura bio-psico-social, lo cual es cierto, pasándose por alto la dimensión tecnológica, cuando en realidad el hombre, desde sus orígenes, se ha movido en cuatro dimensiones tecno-bio-psico-social. Omisión que nos ha llevado a ver a la tecnología como algo ajeno al verdadero progreso humano, lo que ha conducido a posiciones encontradas entre los defensores del progreso tecnológico a toda costa y a todo riesgo y los defensores de un progreso humano independiente de las tecnologías.

Cuando en realidad por los siglos de los siglos, el hombre y las tecnologías han estado sufriendo una simbiosis cada vez más estrecha según las tecnologías han ido pasando de ser una infraestructura, herramientas manuales; a ser una estructura que facilita la comunicación, el transporte, la organización empresarial, entre otras tantas implicaciones sociales y económicas, y es que, según el hombre avanzar en su progreso humano, las tecnologías son parte inseparable de ese progreso. Lo cual siempre ha traído riesgos, desde el uso del fuego, puede ser considerada la primera de las armas de exterminio masivo, hasta el uso de las nuevas tecnologías convergentes (NBIC).

En nuestros días, la situación se hace mas y mas compleja, la razón; nos acercamos a un punto en que la tecnología dejará de ser una estructura (tecno-socio-economica) para pasar a ser una superestructura, capaz de participar en las decisiones del planeta y formar parte de una nueva consciencia colectiva, llámese social, cósmica, planetaria, etc. En mi opinión, este es el problema más importante que enfrentaremos en el transcurso de este siglo: ¿Cómo relacionarnos con las tecnologías según estas se vayan haciendo cada vez más independientes, mientras, paradójicamente, el hombre se hará más dependiente?

Para nadie es un secreto que somos criaturas sociales y que no podemos vivir fuera del contexto social, somos totalmente dependientes de la vida social y las relaciones que durante siglos se han establecido, solo que estas relaciones, cada vez se soportan más en los medios tecnológicos, que han ido desde la imprenta, la radio telefonía, las computadoras hasta llegar a los modernos medios sociales de comunicación: blogs, wikis, redes sociales, etc. Es indudable que las tecnologías forman parte de nuestro quehacer diario.

Por suerte hasta hoy el hombre siempre ha sabido manejarse con las tecnologías como estructura, con más o menos éxito (siempre han surgido uno que otro desastre tecnológico). Un ejemplo exitoso ha sido el uso del automóvil, el cual obligó a profundos cambios en la estructura de los países, tales como carreteras, código de transito, semáforos, policías de tránsito, etc. Para poder garantizar la circulación de los vehículos con el mínimo de accidentes. Con gran despliegue de conocimientos (no digo sabiduría), el hombre ha sabido sortear las dificultades que han ido surgiendo a lo largo de su historia teniendo siempre a la tecnologías como un medio para sus fines, hayan sido estos para el beneficio de la humanidad o para su destrucción (las guerras).

(Continúa en el próximo artículo)

Obras publicadas:
Inteligencia Artificial, el futuro del hombre

0

Ya cerramos con este artículo los enfrentamientos ante las posiciones que se irán produciendo según el transhumanismo se vaya haciendo una realidad. Este último es la razón de ser de todos los presupuestos anteriores y en él se cifran todas las esperanzas, para bien o para mal.

Enfrentamiento biopolítico ante el problema tecno-científico

Potter, haciendo referencia a la medicina, se pregunta, ¿cuándo no aplicar toda la tecnología disponible?

Riesgos tecnológicos:

T. Singularistas: El progreso tecnológico es la única solución (imperativo tecnológico) y debe ser acelerado. Advenimiento de una singularidad tecnológica.

T. Liberal: La tecnología es incontrolable, cualquier intervención del gobierno siempre trae consecuencias imprevistas. Los riesgos son manejables sin el gobierno (resignación)..

T. Democrático: Los riesgos son manejables con la ayuda de la supervisión democrática y la gestión (regulación)

B. Luditas: Los riesgos son tan enormes y desconocidos y las instituciones reguladoras no son confiables, por lo que la mejora debería ser prohibida (renuncia)

B. Social: Las tecnologías deben ser controladas y en caso de duda deben ser prohibidas (precaución).

B. Progresista: Se pretende que las tecnologías sean asequibles a todos pero, antes, hay que erradicar la pobreza. Se necesitan cambios sociales e individuales que modifican nuestra mentalidad actual. Se pueden alcanzar logros alternativos sin contaminación o degradar al planeta y a la propia naturaleza humana. Es necesario saber manejarse con la tecnología y crear una superestructura tecnológica sostenible que se integre armónicamente al contexto humano y no lo invada de forma negligente con fines hegemónicos o de riquezas.

Resumen

Transhumanistas: El progreso tecnológico es la única solución viable por lo que es imprescindible, desarrollar, acelerar y aplicar todo el potencial tecnológico cuanto antes y pasar a una superestructura tecnológica.

Bioconservadores: Los riesgos son enormes y desconocidos. Se debe controlar el desarrollo tecnológico teniendo en cuenta su impacto sobre la sociedad y las consecuencias que tendrá sobre el individuo. Conservar la estructura tecnológica.

Critica al transhumanismo

·                     Favorece el surgimiento de una superestructura tecnológica basada en la competencia y el individualismo.

·                     Las superinteligencias que surjan se integrarán al contexto actual basado en el poder y se convertirán en otro competidor

·                     Subordinación del progreso humano al progreso tecnológico.

·                     En general se propone una superestructura tecnológica poshumana donde la vida, como la conocemos hoy, dejará de existir.

Recomendacion
Inteligencia Artificial, el futuro del hombre

0

Enfrentamiento biopolítico ante el problema eco-sostenible.

Potter se cuestiona: ¿Cómo alcanzar el éxito a corto plazo sin destruir la opción futura de supervivencia?

Protección ecológica:

T. Singularista: Las tecnologías, cuyo potencial es infinito, en un futuro serán capaces,  con la nanotecnología, de reconstruir la materia y de ir sustituyendo lo natural por lo artificial. Evolución artificial

T. Liberal:Libre mercado. El mercado puede resolver todos los problemas ecológicos. El escenario de un futuro prospero  donde la economía puede crecer indefinidamente sin tener en cuenta los límites del planeta.

T. Democrático: Una combinación de la regulación prudente y ecológicamente orientada a las tecnologías, pueden prevenir y reparar los daños ecológicos. Regulación de las tecnologías hacia lo ecológico, existe la “intención” de preservar al planeta.

B. Ludita: La humanidad debe dejar de ser el mayor depredador del planeta y abandonar radicalmente sus hábitos y  costumbres. Conservar la evolución natural.

B. Sociales: Eco-socialismo: La causa del problema está en la apuesta por el crecimiento indefinido, lo que ha traído como consecuencia el agotamiento de los recursos del planeta siendo el sistema capitalista el responsable del deterioro del planeta y debe ser cambiado. Se debe controlar el crecimiento económico. Proteger la evolución natural.

B. Progresista:Necesidad de un enfoque evolutivo y sus consecuencias futuras. Determinar el futuro de forma evolutiva y no de forma radical en el presente, para que, no solo, responda a nuestros intereses actuales, lo cual puede perjudicar las decisiones futuras; al tomar decisiones que podrían ser irreversibles  o que comprometan el futuro, y no dejar otra elección.

El dilema para Potter radica en cómo alcanzar los alimentos actuales y las fibras necesarias sin contribuir a las dificultades futuras al ignorar la necesidad para la diversidad biológica en el mundo natural

En realidad el problema no consiste en el retorno a la naturaleza y llevar una vida casi primitiva, ni tampoco en la conservación a ultranza de la naturaleza, los problemas de hoy son cada vez más complejos y requieren de soluciones trans-disciplinares, los humanos son responsables de los problemas que enfrentamos y la protección del planeta es el principio fundamental de la vida.

Resumen

Transhumanistas: La tecnología cuyo potencial es infinito, será capaz de reconstruir la materia y de ir sustituyendo lo natural por lo artificial.

Bioconservadores: En lugar de una actitud egocéntrica y consumista hay que ir a la  responsabilidad con el planeta y al compromiso con las próximas generaciones. Desarrollo sostenible

Critica al transhumanismo

·                     Favorece la irresponsabilidad y el deterioro del planeta (este puede ser reconstruido).

·                     Se fomenta la sustitución de los recursos naturales por los artificiales. El problema se reduce en quien es más rápido: la destrucción o la reconstrucción.

·                     En general, se quiere sustituir la evolución natural por una evolución artificial que dé lugar a una nueva especie poshumana y, por supuesto, a la destrucción del planeta natural y la reconstrucción de uno artificial. Pienso, ¿no sería más lógico construir, entre todos, un planeta artificial fuera de la Tierra?

Próximo artículo: Transhumanistas vs Bioconservadores (6)